—Soy mayor que tú —me responde.
—Sí, creo que al menos unos ochenta años, ¿verdad? —le pregunto divertida.
—¡Vez a lo que me refiero! —me comenta riendo—. Nadie, aparte de mi familia, me habla con tanta soltura, ¡y no, no son tantos años! —Concluye riendo aún.
—Siento mi atrevimiento —le digo disculpándome y volviendo a enrojecer.
—Me encanta como te sonrojas, ¡quisiera saber porque otras cosas te pones así!
—¡Vaya que es directo! —le reprocho.
—Tengo que serlo, voy por lo que quiero.
—Mm... —alcanzo a decir únicamente, porque una rubia de las del estándar de las que trabajan en BS se acerca a nosotros y le dice.
—¡Stefan aquí estás!, te estaba buscando, Santamaría quiere hablar contigo, te está marcando al celular pero quizá lo tienes en silencio aún, que si le puedes corresponder —le pide.
—Gracias Carol, en un momento le correspondo —le responde a ella y saca su teléfono celular para revisarlo, en eso le suena el teléfono a la rubia.
—Debo contestar, con permiso —dice ella y se retira.
—Ya van a terminar los treinta minutos del receso, debo dejarte pero fue un gusto hablar contigo —me dice Stefan—. Si estás disponible al terminar la presentación podemos ir por un café y seguir charlando si gustas —me ofrece.
—Tengo turno en la cafetería —es mi respuesta, aunque a decir verdad me encantaría, pero no se lo hago saber.
—Entonces nos vemos el lunes en la oficina —me dice tendiéndome la mano.
Había escuchado el cliché de los escalofríos que te recorren el cuerpo, con un solo toque o roce de la piel cuando una persona que te gusta te toca, pero no imaginé que fuera cierto y mucho menos pensé ser testigo de ello.
—Hasta pronto —respondo con vos entrecortada por la emoción de lo que acabo de sentir, en cuanto se aleja de mí siento el teléfono vibrar y al revisar es el mismo número del que llamaron anteriormente, lo contesto de inmediato.
—Buenas tardes —contesto nerviosa.
—Buenas tardes, ¿tengo el gusto con la señorita Bianca Winston?
—Sí, ella habla, ¿de parte de quién?
—Habla con Gisela Santos, le llamo de recursos humanos de BS Corporations.
—Si dígame —respondo emocionada.
—Le llamo para informarle que ha sido seleccionada, para formar parte de nuestro equipo de pasantes, tendrá que presentarse el próximo lunes a las dos en punto, en nuestras oficinas corporativas, pregunta por mí en recepción, estoy en el vigésimo quinto piso, aquí le daré mayores detalles. Traiga por favor sus documentos personales, aquí le haremos saber que otra documentación tiene que tramitar.
—Si claro, ahí estaré puntual, muchas gracias —le respondo.
—Bueno Bianca, esto sería todo, la esperamos el lunes, tenga feliz tarde —dice despidiéndose.
—Buenas tardes igual para usted —le respondo y luego escucho como cuelga la llamada.
Me siento muy emocionada por haber sido seleccionada y por la gran oportunidad que me están dando, veo que todos están regresando a sus asientos y hago lo mismo, cuando ya estoy en la butaca llegan Lore y Julio que nos traen café a Sofía y a mí.
—Gracias —le digo a ambos, en cuestion de segundos se nos une Sofia.
—Te vi platicando con ese gilipollas, creo que le gustas a don controlador —comenta como si estuviera dando la hora a alguien.
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Señor Brown no firmaré ese contrato.
RomanceBianca, anhelaba con todas sus ansias ser aceptada en el programa de pasantías de BS Corporation, y sintió pánico, cuando estando en el sofisticado edificio, ya lista para su entrevista, un descuido la hizo caer con su trasero sembrado en el piso, a...