—Sí, solo quiero hacer un experimento y saber si soy capaz de cabrear, al que cree que no sé en dónde tiene los cojones —nos dice, a los tres como si nos estuviera contando un secreto.
Luego se pone a perrear con Julio.
—Vas a hacer que a mí me corten los cojones —le dice Julio bailando pero sin tocarla.
Lore y yo les seguimos la corriente, y bailamos alrededor de Julio también, Sofía no contenta con eso, se me acerca y me dice.
—Vamos a ver que lleva Julio abajo —luego, comienza a intentar desabotonarle la camisa.
El pobre se ríe nervioso y evade las manos de ella
—Has jurado que esta noche me dejen eunuco —le comenta Julio colocándose atrás de mí, siempre bailando.
Yo me doy vuelta y comienzo a bailar con él, veo pasar otra prenda de ropa hacia la mesa en donde está Javier, y es Sofía que se ha quitado la blusa, y solo ha quedado en un top a media cintura y sin tirantes, los chicos del rededor, han comenzado a aplaudirle para que se la quite.
Julio se me queda viendo y la agarra de las manos, para detenerla
—¡Suficiente del Show princesa!, por más audiencia que tengas, ¡no pienso dejar que te encueres enfrente de todos! —le dice, ya sin ningún rastro de diversión.
—¡Suéltame!, que quiero que ese idiota vea que me han crecido los pechos —le responde forcejeando con él, para que la deje quitarse el top.
Javier llega hasta a donde nosotros justo en ese momento, y prácticamente se la quita a Julio, que aún sigue luchando con ella.
—¿De verdad piensas dar ese show? —le pregunta un nada contento Javier y mucho menos amable, como suele ser él.
—Puedo hacerlo en privado ¡si quieres! —le ofrece Sofía riendo, y agarrándose a su cuello, tratando de rozarse a él.
—Toma, ponte esto —le ordena Javier entregándole la chaqueta—. Despídete de tus amigos, que nos vamos—. Dice agarrándole la mano.
—¡Tú no eres mi papá, ni mi hermano para mandarme! —le reprocha Sofía molesta porque la haya prácticamente regañado.
—Eso tiene solución —le responde Javier sacando su teléfono.
Se nota que está realmente cabreado, ¡nunca imaginé verlo así!, siempre está tan contento y tiene algún comentario chistoso que hacer.
—Qué vas a hacer —le pregunta Sofía poniéndose la chaqueta.
—A llamar a Carlos.
—¡No te atreverías! —lo reta ella.
—¿Tú crees? —le responde Javier.
Mostrándole el teléfono, que está marcando el número del papá de Sofía.
—Está bien, vámonos —le responde ella obediente, no le llames, va a matarme—comenta derrotada, viéndonos a nosotros con cierto brillo de diversión.
Javier cuelga la llamada, y la agarra del brazo, Julio los detiene y le pregunta a ella.
—¿Vas a estar bien?
—¿Con él? —Le responde Sofía fingiendo seriedad—. ¿Tú qué crees? —le pregunta.
—Compórtate, que no está en sus cabales —le dice Julio a Javier
Javier no le responde, pero se le queda mirando, a continuación sigue su camino llevando a Sofía de la mano.
—Nosotros también nos vamos, agarra tus cosas que te voy a llevar a tu casa —me dice Stefan —tomándome del brazo.
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Señor Brown no firmaré ese contrato.
RomanceBianca, anhelaba con todas sus ansias ser aceptada en el programa de pasantías de BS Corporation, y sintió pánico, cuando estando en el sofisticado edificio, ya lista para su entrevista, un descuido la hizo caer con su trasero sembrado en el piso, a...