Buenos Aires, Argentina
Septiembre, 2022Leonardo:
Llevé una papa frita a mi boca mientras observaba a mi hermano cocinar una de sus especialidades
Ya habíamos terminado de entrenar y yo moría de hambre literalmente. Así que cuando llegue a casa para cenar, Ruggero ya estaba preparando todo
— Hermano —lo llamé sirviendo un vaso de agua—
— Hey
— ¿Te podemos pedir un permiso?
— ¿"Podemos"? —me miró alzando una ceja— ¿quienes?
— Em, Santi, Anita, Orne, Elettra y yo —me señalé — es que antes de que sea la gira queremos hacer un tour por algunas ciudades de acá
— Bueno, me parece bien —sonrió apagando la llama de la cocina— pero, ¿ustedes solos?
— Supongo que sí, ademas tranquilo, Santiago y yo hemos estado investigando un poquito. Y Chiara —asintió escuchándome— nos prestará su auto
Mi hermano y Chiara se conocían desde hace más de dos años quizá. Fue una vez que Ruggero fue de visita a Italia y resultaba que la hermana de Santi también estaba viajando, así que se encontraron y desde ahí se hicieron muy buenos amigos.
— De acuerdo —suspiró— necesito que me manden todo para estar pendiente
— Si, no te preocupes por eso, le aviso a Santi y acordamos
— Bien, por cierto, ¿cómo les fue en su primer día de gimnasio?
— Horrible —rodé los ojos— odio hacer ejercicio, encima Elettra, me hizo una humillación mal
Soltó una carcajada
— Santiago siempre te pidió entrenar juntos, te negabas. Así que sin quejarse hermanito
— Pues tocará
— ¿Y con las chicas como tratas?
— Pues, Ana y Orne todo bien, me conecto un montón con ellas, con la que es un poco complicado, es Elettra —hice una mueca— chocamos siempre
— Y bueno hermano, así pasa siempre, no tienes que conectar al instante con una persona. A veces es complicado
— Igual, Santiago y Ana conectaron desde el minuto uno, no me parece justo que él encuentre amistades muy rápido —me ofendí—
— Ah por Dios, el tema de esos dos es muy fuera de la amistad y lo sabes —me señaló—
Eso si.
— Y tu tema con Elettra es otro. No se soportan. Aunque... del odio al amor hay un solo paso
— Ay, no empieces
Ruggero rió volviendo a la cocina y me crucé de brazos.
No. Voy. A. Enamorarme.
[...]
El fin de semana había llegado y antes de que Santi tocara el claxon yo ya estaba esperándolo fuera del edificio. ¡Necesitaba salir!
Ruggero no estaba y me pidió que cerrara bien el departamento.
— Más ansioso imposible —dijo mi amigo riendo en cuanto entré el auto— che, necesito decirte algo
— ¿Decirme?
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THE JOURNEY
FanfictionUn artista no sería nada sin sus fans y Ruggero eso lo tiene más que claro. Así que decidió mostrarte tal y como es ante un grupo de fans suyas completamente desconocidas pero a la vez muy queridas por él. Solo pocas podrán acompañarlo en su tour co...