¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Aterrizamos en Alemania y mis dos primos se van a perseguir a Gianna, mientras yo hago ronda para vigilar la casa junto a mis hombres y los de mis primos.
Cuando esos dos vuelven, Aless tiene cara de asesino y Luca parece que quiera suicidarse. Hay 6 ex guardias del presidente de Los Estados Unidos, algo importante deben guardar o querer proteger y si mi mente no se desvía demasiado, Gianna podría estar escondiendo a un heredero.
No puedo decirle eso al Don, sin estar seguro. Así que los sigo hacia dentro, hasta que Aless me agarra del brazo a mí y a Luca.
—No os mováis ni un pelo, Gianna os tiene a tiro a los dos— nos advierte Aless y así empieza una de las noches más divertidas.
Efectivamente, la mujer del Don, Gianna, la que huyó por ser marcada como traidora y posible asesina del padre de Alessandro, estaba escondiendo no solo un tesoro, sino tres. Trillizos para ser concretos, los futuros herederos de La Cosa Nostra. Unos niños con el claro carácter De Marchetti y la valentía de la mafia italiana, corriendo por sus venas.
Ah, y Gianna, me ha amenazado y cito textualmente: "Si vuelves a ponerme una mano encima, Darío. Te mataré y tal como me marcaste, jamás conseguirás lo que más deseas, haré que pases un infierno antes de tenerlo."
Así, entendí que Ann le confía su mayor secreto sucio a THE7; yo. Lo que no entiende Gianna, es que yo solo estuve haciendo mi trabajo como miembro de la mesa de Capos de La Cosa Nostra, yo no tenía ni voz ni voto cuando Aless y Luca la decretaron como la asesina de sus padres. Y la quise marcar yo, para que no tuviera que hacerlo Aless, le quité ese peso de encima, para evitar futuras lamentaciones. Preferí que me odiase a mi por eso, total no nos llevábamos muy bien. Solo cumplí con las leyes que tenemos en la familia y que ella en el futuro lo entenderá.
Y lo que no sabe Gianna, es que a pesar de su barata amenaza, acabará posicionándose de mi lado, cuando empiece a entender que su querida amiga, que por lo que noté hace tiempo, es la debilidad de casi todas las chicas, no es feliz ni lo será si no sale de La Tríada.
Tengo que sacar a rastras a Luca y Aless, para volver a casa, están locos por esas dos mujeres... Pero todo está hecho, Gianna nos ha prometido demostrarnos que ella no mató a su suegro, y por lo que me ha contado Aless, tiene muchos puntos en los que no puedo discrepar con ella, así que acato lo que me pide el Don y procedo a esperar órdenes.
DOS MESES DESPUÉS
Cuando mi primo me llamó para ir a la isla privada de Gianna, para pasar el fin de semana, pensé que iba a perder y desperdiciar 72 h de mi vida, pero me animó saber que Ann iba a estar, así que no dudé en preparar un par de chanclas, para estas mini vacaciones.
Paso a la casa, una de las dos casas que tiene Gianna, y sin saludar, pregunto por ella.
—¿Dónde está la ratita de Colt?— Gianna pone los ojos en blanco, mientras que Aless me dispara con los ojos, me importa una mierda, están amargados y no van a hacer que pase un fin de semana encerrados con su historia llena de porquería y cobardía.
