-podes calmarte?- dijo Angie sentada con las piernas cruzadas en la cama mientras Lourdes sacaba otra remera de su ropero y la tiraba al suelo
-ropa comoda- murmuró las palabras que le había dicho Martina ignorando a su amiga -ropa comkda-
Angie solto una carcajada y se dejó caer de espaldas a la cama -sos un desastre- la remera que Lourdes tenía en la mano cayó sobre su cara
-no me estas ayudando- dijo Lourdes
-no me estas dejando ayudar- la mujer se incorporo y la miro con las cejas alzadas
-perdón, que me pongo?- dijo Lourdes cruzándose de brazos y mirando la ropa que estaba en el suelo
Angie se levantó y le paso sus jeans azules, un remera corta gris con negro y sus zapatillas negras -y después te pones tu campera de cuero- se encogio de hombros sonriendo
Lourdes estudio las prendas en su mano y finalmente sonrió -gracias an-
Tras ponerse la ropa y ponerse la campera de cuero Lourdes aplico un poco de maquillaje y se miro al espejo, Angie se había movido de la cama y ahora estaba sentada en el baño para acompañar a su amiga
-que tal estoy?- Lourdes la miro insegura
-linda- dijo angie -y tierna a la vez-
La ojiverde la miro a través del espejo -estoy nerviosa
-se nota- dijo Angie ganándose una mirada asesina de su amiga -pero no tenes que estarlo, solo es Martina, pasas mucho tiempo con ella-
-pero es diferente, me esta dando una oportunidad, pensé que tendría que esperar mucho más, no pasó ni un mes desde nuestra conversación-
-no lo penses demasiado, estoy segura de que aún querrá tomarse las cosas muy despacio, así que solo disfruta de la noche
Lourdes asintio y de repente llamaron a la puerta, puso cara de confusión, eran las seis menos veinte, estaba a punto de salir de casa no quería que nadie la retrasess para su cita. Angie la siguió hasta la entrada y cuando la abrió Martina estaba del otro lado con un ramo de flores en la mano
-hola- dijo la mujer con una sonrisa
-Mar que haces acá?-
Martina había devuelto su auto esa mañana así que había supuesto que ella conduciría para su cita
-yo te invito a salir, es justo que te venga a buscar-
Lourdes noto como el calor subía por su cara como pasaba siempre que estaba con la otra mujer -pense que yo pasaba por vos
-por eso vine un poco antes- estiro la mano y le dio las flores -estas hermosa- Si las mejillas de Lourdes no estaban coloradas antes ahora estaba ardiendo -hola angie- saludo a la otra mujer con timidez
-hola Marti- contesto la peliazul con una sonrisa
Angie le intimidaba un poco y además la había visto en su peor momento cuando Santiago apareció en el bar, la mujer pareció notar la timidez de Martina y se acercó a ella ofreciéndole una mano que la rubia tomó consciente de que Lourdes las observaba
-lo siento por lo de la otra noche- dijo Martina mirándola a los ojos
-no fue tu culpa- dijo Angie
Martina apretó su mano y volvió a mirar a Lourdes -lista?-
La castaña asintio y le dio las flores a Angie -gracias por ayudarme, podes poner esto en agua?-
Angie asintio -salgan de acá-
Lourdes tomo la mano de Martina y ambas salieron de la casa. Angie cerrando la puerta tras ellas
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Estar con ella- Martuli
RandomQuien diría que besar a una desconocida en un callejón iba a cambiar su vida para siempre