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Después de acostar a Isabella, Martina se sentó en el sofá al lado de su hermana. Ahora eran ellas tres ya que Brisa se había mudado hacía unos meses para vivir con su novio

-¿Estás bien?- preguntó Guada dejando su celular a un lado.

-Sí, bueno, necesito hablar con Lu, pero sí, estoy bien-

-¿Discutieron?-

-No, pero creo que herí sus sentimientos. Cuando Isa se lastimó, dije que tenía que volver porque necesitaba a su madre... no quería ofenderla, pero di a entender que ella no... no era capaz de cuidarla-

Guadalupe negó con la cabeza cruzándose de brazos. -¿Sabes que Isa piensa que Lourdes es su madre también, verdad? Y Luli daría lo que fuese por  ser más en la vida de Isa. Sos la única que tiene un problema-

-No tengo ningún problema- dijo a la defensiva.

-Isabella de vez en cuando la llama mamá, lo escuchaste y yo también-

Martina pensó en todas las veces en las que su hija se había referido a Lourdes como su madre y no eran pocas. No solía decirlo directamente, pero a veces se le escapaba decir "Mi mamá me llevó al parque" o "Mi mamá tiene los ojos verdes"

-¿Y qué?-

-Que nunca haces nada, nunca hablaste con Luli sobre eso, ni con Isa. Es pequeña, pero entiende más de lo que crees y nunca validaste esa conexión que hay entre ellas-

-¿Queres que le diga que Lourdes es su madre?-

-No- la adolescente ya habia empezando a irritarse. -Pero deberías tener esa conversación con Lourdes, y si tu hija llama mamá a tu novia, deberías por lo menos reconocerlo, no hacer como si no hubiese pasado-

Martina suspiró cruzándose de brazos -No es tan fácil-

-¿El qué? Le estás rompiendo el corazón a Lourdes poco a poco-

-¡No hice nada!- La rubia alzo la voz.

-Exactamente- dijo Guada mucho más tranquila. -¿Alguna vez hablaste con ella de vivir juntas? ¿De su papel en la vida de Isabella? ¿Del futuro?-

Martina pensó unos segundos y pese a que no quería darle la razón a su hermana, negó con la cabeza.

-Te gustan las excusas- dijo acercándose a su hermana. -Primero era Isabella y después fui yo... pero pasaron dos años, Lourdes se merece por lo menos tener esa conversación con vos, no le hagas daño-

-No quiero hacerle daño. Es el amor de mi vida-

-Pues déjala serlo. Si vas a pasar el resto de tu vida con ella, deja que forme parte de esta familia de verdad, no a medias-

-Guada, no soy tonta... sé que ellas son... sé que Lu la quiere como yo la quiero a ella, pero da miedo. Quiero todo eso que decis, quiero vivir con ella y ver cómo Isabella la llama mamá, pero no sé cómo hacer ese cambio...-

-Da miedo, pero también te daba miedo salir con ella y mira lo felices que son, y te daba miedo que yo viniese a vivir acá y nunca fui más feliz. Y estoy segura de que estabas aterrorizada cuando te quedaste embarazada, pero ahora no podes imaginarte una vida sin Isabella-

Martina se giró para mirarla ,¿Desde cuándo me das lecciones de vida?-

Su hermana soltó una carcajada y la abrazó -anda a verla yo me ocupo de Isa si se despierta-

Martina suspiró. -No me contestó al mensaje que le envié hace un rato, seguro que está dormida-

-Anda a darle un abrazo- insistió su hermana.

Estar con ella- MartuliDonde viven las historias. Descúbrelo ahora