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Lourdes se despertó por segunda vez en la cama de Martina pero cuando recordó las cosas de la noche anterior suspiro dejándose caer en la almohada abrieron y cerrando la mano unas cuantas veces sintiendo algo de dolor todavía. Ella seguía mirando el techo cuando noto que la puerta se abría ligeramente y Brisa asomaba la cabeza

-puedo pasar?-

Lourdes asintió incorporándose en la cama y Brisa camino dentro de la habitación sentándose en el borde opuesto -Martina me contó todo

Lourdes suspiro y se froto la cara -lo siento, no quería... no pensé... no-

-le pegaste a un imbecil no es para tanto- dijo Brisa -Martina me dijo que te preocupa que ella piense que sos violenta o algo pero no te preocupes por eso

-pero Santiago...-

-Lourdes hay una diferencia entre dar un buen golpe y ser un maltratador. Vos no te pareces en nada a ese tipo y Martina no es una santa hace unos meses le pego una piña aun hombre que intento tocar a una mujer sin permiso en el bar... ella no es tan frágil como crees-

Lourdes asintió -aún así no volveré a hacerlo-

-lo del golpe pero espero que no pero que la defiendas con tus palabras si alguien la insulta si- dijo Brisa sonriendo

-siempre-

-cambia esa cara, vamos a desayunar. Isabella lleva media hora deseando venir a despertarte-

La castaña sonrió ante la mención de la pequeña -por que no la dejaste hacerlo?- dijo mientras salía de la cama

-tu querida Mar dijo que trabajas mucho y que tenes que dormir

Lourdes se puso colorada y siguió a Brisa. Cuando entraron al salón Isabella salió corriendo a saludarla y ella repartió besos por toda su cara. Lourdes tenía miedo de mirar a Martina pero sabía que tarde o temprano tenía que hacerlo, cuando alzó la vista la mujer le sonreía tímidamente

-buenos dias- dijo la castaña dejando a Isabella en el suelo

-buenos días lu-

Las dos se quedaron mirándose hasta que Brisa empujó a Martina en dirección de la ojiverde -ya basta de este baile de miradas es muy temprano-

Martina negó con la cabeza pero camino hacia Lourdes y tomó su mano -te duele?-

-no mucho- respondió con una mueca

Martina dejo caer su mano y Lourdes dio un paso adelante abrazándola, la rubia no la rechazo y la rodeo con sus brazos -no volverá a pasar lo de ayer-

Martina no dijo nada pero sonreía cuando se separo así que Lourdes empezó a relajarse. Las cuatro mujeres se sentaron a desayunar

-martulis, cuando será la próxima cita?- dijo Brisa

-no nos digas asi- pidió Martina mientras ayudaba a Isabella con su comida

-tengo que saber para cuidar a Isa- Brisa sonrio -no tenes libre el viernes? Yo estoy libre el viernes para quedarme con mi Benza favorita- Martina le dedico una mirada amenazante y la pelinegra se quedo mirando a Lourdes -que decis? El viernes?-

-emmm, el viernes tengo un acto de la empresa... iba a preguntarte si querías venir conmigo- dijo Lourdes nerviosamente -pero no sabia si trabajabas, puede ser aburrido así que no te sientas obligada a decir que si...-

-será elegante?- pregunto Brisa llevándose otro bocado a la boca -Martina esta impresionante ese vestido negro que tenes en el ropero-

Martina le lanzó una servilleta en la cara -podes parar?-

Estar con ella- MartuliDonde viven las historias. Descúbrelo ahora