Visitas inesperadas

635 39 0
                                    

Cuando Emma se marcho, Neal se quedó ahí sentado en la barra del bar mientras jugaba con su cerveza aun sin tocar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cuando Emma se marcho, Neal se quedó ahí sentado en la barra del bar mientras jugaba con su cerveza aun sin tocar. Suspiró. Probablemente lo mejor que podía hacer ese momento era largarse. Coger a Elia y marcharse de allí. Como se alegraba de que su hija no estuviera en el apartamento cuando ellos habían llegado. Había sido una suerte que tuviera que hacer un trabajo con una compañera de clase.

Tampoco sabía como iba a explicarle lo que había pasado, ni a ella ni a su madre. No, definitivamente no podían marcharse así. Y en el fondo se dio cuenta de que en realidad tampoco quería hacerlo. No solo porque no podía separar a su hija de su madre así como así. Si no que tampoco sabía si podía volver a alejarse de Emma (a pesar de que podía entender perfectamente el enfado de ella), y menos dejarla a su suerte con su padre después de no "cumplir" el trato.

No. Tenía que volver a su apartamento. Pagó rápidamente la cerveza aunque no había bebido nada y se apresuró a salir del bar.

—¡Eh! —había llegado a tiempo, podía escuchar los gritos de su padre desde las escaleras. Neal aceleró el paso y entró rápidamente golpeando la puerta para abrirla de golpe. Tanto Emma como su padre se volvieron a mirarlo de inmediato. Podía ver la sorpresa en el rostr de Emma, su padre también estaba sorprendido pero había algo más en su expresión, miedo. Neal por un momento se paralizó al verlo, porque era él, era su padre, se veía como el de antes, no como el Oscuro. Luego recordó porque estaba allí y la discusión que había escuchado antes de entrar y se recompuso rápidamente, aunque al hablar de nuevo no alzó tanto la voz—. Déjala.

Rumpletiltskin solo podía mirar a su hijo, y aunque había tenido todo preparado antes de partir, todo lo que quería decir, las palabras se atascaron en su garganta. Neal sin embargo no miraba a su padre, su mirada se cruzó con la de Emma preguntándose como se sentiría ella después de que el hubiera roto su "pequeño trato".

—Bae —dijo finalmente Rumpletiltskin rompiendo el silencio entre los tres. Su tono suave contrastaba mucho con el que había estado usando antes.

Neal miró por fin a su padre. Su rostro era serio, indiferente. Asintió levemente con la cabeza sin pronunciar palabra. Habían pasado tantos años desde la última vez que había visto a su padre.

—¿Has vuelto por mi? —preguntó Rumpletiltskin

—No —respondió Neal con tono algo seco—. He vuelto para que no le hagas daño —Neal señaló a Emma, que bajó la cabeza y miró de reojo a Gold—, ya he visto que les haces a los que incumplen tus tratos.

—Por favor, escuchame, hijo... —pidió Gold

—No me interesa hablar contigo —dijo Neal—, largo

—No pienso irme —afirmó Gold

—¡Fuera de mi apartamento! —gritó Neal

—Neal... —intentó intervenir Emma con tono tranquilizador

ONCE UPON A TIME (NEAL'S DAUGHTER)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora