El Eclipse de Diana

Parte 169: El poder del sol

En cuanto dejó a Leona en el suelo Shyvana no pudo evitar ir tras Kadregrin para comprobar que se encontraba fuera de combate. Debía de estarlo.

Pero estar inconsciente y estar presente eran cosas distintas. 

No estaba en donde le había visto caer, lo cual solo podía significar una cosa. Y es que la mujer que le ayudó regresó...

"Las alturas no son lo mío..."

"¿De verdad?"

"Ashe, por el contrario, no entiende el significado de vértigo..."

"¿Cómo es ver una flecha de cerca?" - preguntó Cithria interesada

"Una vez me clavó una"

"¿En serio?"

"Fue algo accidental, pero créeme que dolió..."

"Pero usted es el aspecto del sol, debería ser inmune al frío"

"No... la cosa no funciona del todo así..."

"¿Y es cierto que su actitud es fría como un témpano?"

"No, ella..."

Shyvana descendió, adoptando su forma humana mientras aterrizaba. Y se le notaba visiblemente molesta.

"Otra vez ha escapado..."

"¿Cómo es posible?"

"Debe de haber sido esa extraña hechicera de pelo purpura"

"Lo siento, Shyvana" - se apresuró Cithria - "No... no he resultado ser de demasiada ayuda... por no decir que no hice nada..."

"Cithria, nuestra presencia es más diplomática y táctica que otra cosa"

"Pero Xin Zhao..."

"No te lo tomes a pecho" - dijo la mujer dragón - "Además, todavía no ha terminado nuestra pequeña caza"

"¿Piensas seguir buscándolo?"

"Es un problema de Demacia, no de Targon"

A Xin Zhao le hacía un poco de gracia el comportamiento de Shyvana.

En el fondo quería cumplir la misión con la mayor eficacia posible al haber sido una petición de Jarvan. Poco más que comentar...

"Taric, ¿qué opinas al respecto?"

"Habéis... habéis hablado de una mujer... ¿de quién habláis?"

"¿Leona no te puso al día?"

"Me dijo algo sobre que un dragón buscaba asesinarme..."

"Preferí dejar los detalles para cuando nos encontrásemos con él" - les explicó Leona - "No pensé que atacaría repentinamente"

"Ese tipo ataca a la mínima que puede..."

"Pero poseía poderes solares"

"Seguro que ha sido esa extraña hechicera, ella le trajo aquí"

"Una mujer que da poderes a dragones..."

"Lo que dices es poco usual" - afirmó Leona - "Es el sol el que otorga sus poderes a sus fieles, que lo tenga un dragón..."

"¿Acaso será religioso?"

Todos se voltearon hacia Cithria, quien no soltó el comentario más inteligente.

"No, pero quizás está jugando con fuerzas mayores"

"¿Fuerzas mayores?"

Lejos de allí, en una zona recóndita, se encontraba Ana. 

A su espalda estaba Aurelion Sol, observando a un Kadrigran inconsciente y herido en un pequeño estanque. Siendo curado por la mujer.

"¿Por qué le volviste a salvar?"

"Porque lo habrían capturado o por aún..."

"Fracasó en su patético intento"

"La ira parece cegarlo... es el primer dragón que conozco que habla a parte de ti..."

"Es muy insistente en su venganza"

"........"

"¿Qué ocurre?"

"Se lanzó tan rápido a por ellos... no me dio de tiempo a preguntarle..."

"¿Preguntarle qué?"

"De donde viene todo ese odio, toda esa ira hacia ellos..."

"¿Y qué importan esas cosas?"

"Detrás de nuestras acciones siempre hay un por qué... ¿por qué los dragones me ayudan? ¿por qué me hablan?"

"Porque naciste para..."

"Porque ellos entienden mis intenciones... me apoyan..."

"........"

"No sé si Kadregrin podrá ayudarnos de nuevo... pero pronto me encargaré del aspecto demaciano..."

"........"

"En su nombre y en el tuyo, Aurelion..."

El Forjador de Estrellas no estaba del todo seguro de sus intenciones.

Le dio poder, sembró semillas en su mente, y era un títere más manipulable que Aphelios, pero... algo raro había en su cabeza...