El Eclipse de Diana

Parte 134: ¿Dónde está Diana?

La hija de la luna había acudido al Instituto de Guerra con el pensamiento de localizar a algún campeón capaz de acceder al Reino Espiritual. Algo no muy común.

Una de sus primeras opciones fue ir a consultar al Ojo del Crepúsculo, el mayor experto en ese ámbito... pero al llegar no se encontraba presente...

"He venido para nada..."

"Yo también me alegro de verte"

"Veigar, no hay nadie en este maldito lugar que sepa de ese sitio..."

"¿Seguro?"

"Ni Yuumi, ni Norra, ni Shen, ni Zoe..."

"Yo no me fiaría mucho de esa última, cruza un portal suyo y quizás acabes muriendo en el espacio por falta de aire"

"¿Qué otras alternativas tengo?"

"Hay muchos magos, quizás encuentres a alguno que..."

Pero cuando el brujo fue a terminar su frase, se percató de que Diana había desaparecido. En un solo segundo se había esfumado.

Desde el punto de vista de la guerrera era el brujo quien se había desvanecido.

"¿Veigar? ¿Dónde estás?"

"........"

"Maldita sea... ¡Veigar!"

No era un sueño, estaba bien despierta. Corrió por los pasillos, pero no encontraba a nadie, ni invocadores ni campeones.

"¿Quién demonios está detrás de todo esto?"

"........"

"¿Nocturne? ¿Karthus? ¿Aphelios?"

"Zrrrrr...."

"¿Qué es ese ruido?"

"Zrrrrr..."

Quería ver de dónde venía ese extraño sonido que oía, avanzando por el instituto.

Lo que no espero fue que le atacaran con una especie de lanza que terminaba en un martillo. Y su atacante no era muy normal...

Parecía un gólem o androide muy antiguo, con un reloj de arena en el pecho.

"¿Qué tipo de basura eres tu?"

"Zrrr... iiii...."

"Eso no resuelve demasiadas du..."

El gigantesco ser intentó golpear a Diana, quien creí que con su velocidad podría evadirle.

Pero no, parecía de hecho ser algo más lenta que de costumbre.

El golpe la envío a chocarse contra una ventana, la cual no se rompió pese al impacto. Cuando miró a través de ella se percató de algo extraño.

"No hay cielo... está todo oscuro... no hay... nada..."

"Zrrriii..."

"Como este sea otro truco de un espectro..."

"Zrrr... iii..."

Diana usó su Impacto Creciente, solo para ver cómo el ataque se desvanecía antes de que pudiese siquiera impactarle.

Por el contrario, los ataques de aquella criatura sí que dolían.

"Piensa, Diana... no es un ser del Vacío..."

"Zrrr... iii..."

"Tampoco parece creado por Viktor o Aphelios o..."

Creo que le ha molestado que le llamases basura...

"¿Quién ha dicho eso?"

"¡Zrrr! ¡Iiii!"

El monstruo intentó golpearla de nuevo, pero esta vez pudo esquivarlo. Lo que Diana no esquivó fue su Impacto Creciente.

¿De dónde había salido? ¿Fue golpeada por su propio ataque?

Me parece que ya ha tenido suficiente...

"Zrrrr..."

La criatura se detuvo de inmediato, con su puño a centímetros de la lunari.

Diana se extrañó un poco de lo sucedido, hasta que prestó algo más de atención al combate que acababa de tener.

Lamento el percance, Diana...

"Si tuviese que decirte todas las cosas de las que debería lamentarme..."

Encontrarte aquí ha sido toda una sorpresa...

"Una sorpresa mutua, ¿dónde estás?"

En la biblioteca, puedes encontrarme allí...

"¿Seguro que no me espera ninguna otra sorpresa?"

En principio no... creo...

"Creo..."

Ciertamente no parecían haber más de esas criaturas en el recorrido hasta la biblioteca. Aunque esa sensación seguía.

El agua no se movía, el viento no soplaba, no había ruido...

Cuando llegó a la biblioteca se encontró con Zilean, tomándose una taza de té y rodeado de un montón de libros.

"Zilean..."

"Saludos, Diana, si no es mucha molestia... ¿qué haces aquí?"

"Eso mismo quiero saber yo"