El Eclipse de Diana

Parte 55: En el umbral

A través de la historia de fantasmas de un chico es que Leona se había encontrado con Karthus, quien se denominaba la Voz de la Muerte.

Y no, no era muy bienvenido en Targon, sobretodo teniendo en cuenta al individuo al que servía. Aunque la presencia de Soraka ayudaba.

"¿Soraka?"

"Leona... ¿qué haces aquí?"

"Un solari detectó una presencia espectral, y resultó ser Karthus..."

"Saludos..."

"No eres bienvenido en estas tierras, Karthus... sobretodo después del harrowing masivo que provocó el Rey Arruinado..."

"Seguía ordenes"

"........"

"Además, yo no fui quien asoló Targon... jamás he puesto un pie en este profano sitio..."

"¿Osas llamarnos profanos?"

"Al igual que los Shurimenos... los aspectos profanáis el concepto del fin..."

Soraka, una estimada sacerdotisa, solo podía presenciar lo incómodo que resultaba para ambos la mera presencia del otro.

"Leona... Karthus no ha acudido con mala voluntad a Targon..."

"Soraka, diga lo que diga este ser..."

"Solo ha venido a verme..."

"Eh... ¿ha venido a matarte?"

"He dicho que ha venido a verme, no matarme, verme"

"Pero..."

Ella no podía entenderle, al menos hasta que se dio cuenta de su mirada.

No era la misma que la de aquella amable sacerdotisa de siglos de antigüedad y sabiduría. Parecía algo más humana y preocupada.

"No guardo rencor contra los targonianos, tampoco odio..."

"........"

"Mi ocasional aparición no es más que los designios de aquel que logró superar el umbral de la muerte..."

"........"

"Dicho esto, prefiero retirarme a causar un alboroto o..."

"Espera..."

También había algo extraño en el liche.

Por lo general era calmado y educado, dentro del Instituto de Guerra, pero fuera no era tan piadoso con comentarios de otras personas.

Y se estaba retirando sin querer conflicto alguno...

"Si es cierto que solo quieres hablar con ella puedes quedarte..."

"........"

"Pero no quiero a nadie muerto esta noche..."

"Descuida... no ocurrirá..."

"........"

"Y tú, Soraka... ya hablaremos en otro momento..."

"Cuando gustes..."

El aspecto del sol se retiró, momento que representó un duro alivio para la mujer cabra. Su corazón parecía estar teniendo un infarto.

Y para el liche también significó una liberación en cierta medida.

"No me agrada esa mujer..."

"Ya lo he notado..."

"Aunque al menos no era Diana, ella hubiese saltado al cuello"

"No sigas mencionando a personas que pueden aparecer de la nada..."

"........"

"¿Ocurre algo?"

"Me parece curioso cómo ha manejado la situación"

"Quizás pensó que sin la niebla negras no eras tan problemático"

"O quizás..."

Sufrió un golpe de empatía. ¿Se hubiese portado cualquiera de sus aliados solari de la misma manera si la hubiesen pillado hablando con Diana?

Este pensamiento rápidamente se desvaneció en cuanto miró a Soraka.

"Por un momento pensé en agarrarla del cuello..."

"........"

"Pero luego pensé que sería muy poco civilizado..."

"Sí, y tu imagen no hubiese mejorado mucho"

"¿De verdad piensas que hubiese sobrevivido a ella?"

"Eres un hechicero destacable, algo de juego quizás podrías darle... antes de ser derrotado por una Llamarada Solar..."

"Creo que tendría más posibilidades contra Diana"

"¿Antes o después de que se lanzara hacia tu cuello?"

Pronto pasaron a otro tema que no trataba sobre posibles enfrentamientos, sino más bien sobre ellos mismos.

Ocultos por la emergente niebla, no corrían el peligro de ser vistos salvo que algún otro aspecto lo creyese conveniente. Cosa que no ocurrió.

"Así que Camphor..."

"¿La conocías?"

"Nunca escuché hablar de ella... aunque tampoco soy un experto demonólogo..."

"Dijo que se alimentaba de la duda..."

"Investigaré un poco... aunque, debo advertirte de nuevo que tengas mucho cuidado durante este año, Soraka..."

"........"

"Camphor no es la única que ha puesto su mira en esta región..."