La historia de un amor (Mayfer)

Cap. XIV Como te va mi amor

tras la salida de Fernanda de Pandora, Liliana había suplido su lugar, aunque para los ojos de la rubia nada era igual, tomó distancia total con la morena y además de un par de ocaciones donde se habían topado jamás hablaban.

( boda de Susana Zabaleta)

Maestro de ceremonias: que pasen a cantar las Pandora - las hermanas Lascurain se levantaron, la morena estaba apunto de pararse cuando sintió una mano en su hombre que la sentó de nuevo.
May: dijeron Pandora y tú ya no eres una Pandora.
Susana que estaba al lado de Fernanda miró la reacción y tras una copas esta le contó todo, volviéndose confidente del secreto de estas.
( fin del flashback)

[mis mayferitos perdón la interrupción pero les recomiendo escuchar "Como te va mi amor" en esta parte ]
Aveces la vida es un chiste y un chiste malo.

Mayte caminaba por el centro comercial haciendo una de sus actividades favoritas - tenga cuidado - pronunció al chocar con alguien.

Lo siento - pronunció esa voz temerosa que era difícil de confundír.
May: ¿Fer? - la miró sorprendida pero nerviosa.
Fer: hola May - formó una media sonrisa que hacía notar su incomodidad - ¿cómo te va mi amor? - la rubia tembló al escuchar la pregunta, esta solo la miró y le sonrió.
May: bien - ambas siguieron su camino, después de unos metros y como de película ambas voltearon cruzando miradas para continuar su camino, la morena tomó valentía y dando media vuelta.
Fer: ¡May! - gritó mientras corría hacia ella y la rubia volteaba - ¿quieres ir por un café? - la sonrisa de May fue la señal exacta para externarle la mano, retirarse e ir a un lugar más privado.

Llegando al departamento de Fer, la rubia estaba un poco nerviosa - pasa, no te van a comer los ratones - las palabras de la morena rompieron la tensión.

Fer: te extrañe, perdóname por la pelea - veía su taza un poco apenada.
May: no te preocupes, Ivonne igual estaba estresada - respondió desviando la mirada.
Fer : se ve que te ama mucho, lo pude notes por como reaccionó ese día , pecosa - intentó disipar la tensión, - hacen bonita pareja.
May: Fer - miró a la rizada - no somos novias, nunca lo fuimos, solo somos amigas, aunque siéndote honesta, si pasó algo en un momento de despecho - esto hizo que la morena agachara la mirada y las lágrimas cayeran por su rostro.
Fer: May, no tienes por qué justificarte tu y yo ya no éramos nada, yo si te fui infiel con kike - la morena levantaba todo lo de la mesa, la rubia la ayudaba a lavar la losa - May - esta voltio - te amo - se acercó a ella dándole un beso y como dice la canción, fue una chispa en su equilibrio dinamita que estalló.

Los besos se volvieron cada vez más profundos, como si de ellos dependiera su vida y es que si, cuando uno ama de esa forma el separarse de quien ama es morir lentamente, - ven - la morena la guio hasta la recámara, solo basto cerrar la puerta para que esos besos se acompañaran de varias y respiraciones agitadas, la ropa era el enemigo a matar en ese momento, enemigo fácil de vencer.
Los ojos de la rubia se callaron con el rose de los labios de su amada en sus cenos, se había convertido en el postre más deseado, su pecho era un sube y baja - May - para un momento para mirar a esta a los ojos - contigo no quiero pensar una vida, prefiero improvisar sin miedo a que haya una caída - las mariposas se revolvían en la tibia con cada roze , todo se detia a su alrededor con cada mirada.
Cada esquina prestaba atención para verlas dar vueltas por el cielo burlando al colchón.
May: contigo quiero que las tardes de caricias sean eternas - los vaqueros de la rubia sobraron y las estocadas de la morena en su contra se volvieron lo más importante.
Formando una línea desde su cuello hasta el monte de Venus Fernanda dejó besos asegurándose que ningún palmo de su piel quede sin dosis de amor, se sintió astronauta cuando la rubia abrió las piernas, perdida en sus lunares devorando las galaxias diciéndole adiós a la tierra.
Ante los movimientos de la morena Mayte solo podía pronunciar entre jadeos y gemidos ahogados su - Fer - gimió- estás en mi lista de sueños cumplidos y en la de pecados compartidos  - la morena la miró y después de una sonrisa insertó sus dedos dentro, para continuar con su legua hasta que las piernas de May cerraron aquel pasaje de placer.

La rubia se sentó sobre las piernas de esta y la miró - te amo - sus besos bajaron a el cuello de la morena, - nunca dudes cuanto te amo - beso las clavículas y bajo hasta sus cenos.
¡May! - dijo al sentir la mano de esta bajar a su entre pierna, - amor- abrió los ojos de golpe al sentir sus dedos invadirla.
Los movimientos lentos y placenteros, el cielo sintió envidia al sentirse alcanzado por ambas mujeres.

Fer: tenemos que buscar una forma de estar juntas - dijo recostada en la cama, miró a May y le beso la frente.
May: podemos seguir siendo amigas ante todos, solo te pido exclusividad, prométemelo.
Fer: te lo prometo y te pido lo mismo, no habrá nadie más en nuestras y el día que podamos gritar nuestro amor lo haremos sin miedo.
May: lo prometo.

( Paloma y Fernanda)

Paloma: toma - le entregó una tarjeta a su madre.
Fer: ¿qué es esto?
Paloma: la tarjeta de la doctora Mariana, llámale y agéndale una cita, te lo dije , necesito terapia, la vida sexual de mi mamá y mi madrastra me está traumatizando.
Fer: ¿madrastra? - miró a su hija y soltó una risa.
Paloma: pues eso es no, pero - cayó en cuenta de la promesa - la promesa. ¿Por qué no ....

La puerta de la habitación de la joven sonó.
Paloma: ¿quién?
Héctor: princesa ábreme - la joven suspiró y miró a su madre, se levantó y abrió la puerta - mija ya es tarde - giro y miro a su hija - señorita usted tiene mamitis pero yo necesito a mi esposa - rio y miro a Fernanda extendiéndole la mano.
Paloma: ah no, ni creas, esta señora me prometió una pijamada y en esta casa no se rompen las promesas - miró a su madre y esta entendió el doble sentido, - así que señor, vaya a su cuarto - este solo entro y le dio un leve beso de pico a su mija, abrazo a su hija y salió de cuarto - ¿la promesa sigue vigente? - le pregunto a su madre.
Fer: algo así, tratamos de cumplirla conforme a nuestras posibilidades.
Paloma: okay, entonces mientras yo esté presente respetarás tu promesa, entendido - su madre asintió - en que estábamos.

Mis mayferitos tebgan encuenta que estoy acomodando todo para que la historia agarre vuelo, lo que si es que les prometo final feliz