La historia de un amor (Mayfer)

Cap. XXVII " Solo mia"

Las horas pasaban y en medio del ensayo la tensión era ardua, las miradas penetrates de Fernanda eran evidentes.

Paloma: mamá disimula tus celos, tía Isabel te está mirando desde hace rato - la joven le susurraba al oído a su madre y esta miraba de forma discreta en dirección a la castaña que al notarse descubierta volteó la mirada.

Llegó un breve descanso y en este la rubia aprovechó para ir al sanitario, Ivonne quien no había podido entablar plática con ella la siguió, al salir del cubículo y ver asu amiga parada con los brazos abiertos no dudo en abrazarla, la extrañaba con el alma.
Ivonne: Sabes que no estás sola, aquí estoy para ti, para mi princesa, estoy orgullosa de ti, de tu valentía y de la madre que eres, estoy orgullosa del ser que estás dejando en este mundo, eres muy valiente May, tan valiente que tu valentía necesitaba un cuerpo físico, Valentina, nuestra Valentina, nuestra pequeña - ante las palabras de la pelinegra May no pudo evitar aferrarse a ella y llorar, Ilse ingresaba al baño preocupada por Mayte, al verla abrazar a Ivonne en ese estado se acercó y se unió al abrazo.

Ilse: May no va a ser fácil, pero piensa que en casa hay una pequeña que solo te tiene a ti, que tú eres lo único que tiene en este mundo - la pelinegra al escuchar las palabras de su amiga se sorprendió.
Ivonne: ¿ya lo sabes ? - Ilse asintió con la cabeza, - desde cuando.
May: se enteró ayer, llegó a caso y Vale pensó que era Fer y bajo, no lo sabe todo, nos quedamos hasta el día que Fer regresó con Héctor.
Ivonne: no me lo recuerdes que me dan ganas de volverla agarrar y ... - la interrumpió la rubia.
May: y nada, ahorita solo quiero paz, que las tres nos vayamos a Mérida con Valentina y luego me ayuden a afrontar esto, - ambas mujeres asintieron,  al disponerse a salir del baño la güera le pidió un momento a solas con mayte a la pelinegra, esta solo sonrió y abrazó a Ilse - si es lo que me estoy imaginando solo cuídala, no la lastimes, te quiero, eres una gran amiga pero ella es mi otra mitad, es el yang de mi yin, mi luz en la oscuridad - le susurro a su amiga al oído, esta la abrazó con fuerza.
Ilse: eso haré, pero no es lo que piensas - la pelinegra salió dejándolas solas, - May, si no te sientes cómoda nos podemos ir de una vez - la rubia negó con la cabeza, pero sin darse cuenta alguien escuchaba - May yo lo digo por ti muñeca - la persona que estaba espiando tenía la sangre al escuchar la última palabra - May bonita, no es necesario, vámonos de una vez a Mérida y empezamos todo de cero, te quiero, - le dio un beso en la frente y salió del baño para dejarla pensar, aquella figura se escondía para luego escabullirse.

La rubia se mojaba la cara para disimular las lágrimas cuando unos aplausos sarcásticos la interrumpieron, por el espejo podía ver a la morena con evidente molestia, al notarla en esa postura secó su rostro e intentó abandonar el lugar.

Fer: ¿dónde vas? - la tomó fuerte por el brazo enrojeciendolo - escúchame bien María Teresa, tú te vas con Ilse y yo .... - la rubia cortó la frase.
May: ¿tú qué? - ante su altanería la morena sostuvo con más fuerza su brazo clavando levemente sus uñas - suéltame Fernanda, porfavor me duele - la morena la jalaba en dirección a uno de los cubículos encerrando a ambas ahí - porfavor Fer - rogaba en llanto, para ese punto la mano de la morena ya estaba impresa en la piel blanca de Mayte - me duele - su voz estaba quebrada, ante esto la morena la soltó.
Fer: si tú te vas con ella la mató Mayte, no me va a temblar la mano, nadie toca lo que es mío, tú eres mía, solo mía - la mirada de Fernanda asustaba a la rubia quien podía ver la clara proyección de un homicidio pasional.
May: Estas loca Fernanda, trátate, yo no soy tuya - se disponía a salir del cubículo, la morena la jaló con por la nuca dejándola en una posición sumisa, para acto seguido aprisionar a Mayte en contra de la pared.
Fer: ¿así?, tú eres mía - la mirada a los ojos la furia y lujuria al poseían, - solo mía - jalaba de su nuca exponiendo su cuello las nos de mayte descansaban en la pared, un beso doloroso se impregnó en el cuello de la la pecosa, marcó cada punto de sus clavículas para después bajarle la parte superior de su vestimenta exponiendo sus senos marcándola, el dolor en May era demasía, aquella joven preocupada por ambas entro al sanitario escuchando los leves sollozos de mayte que a este punto solo temblaba levemente ante su desnudes, la morena solo fijaba un punto y la marcaba, su fuerza era descomunal.

Paloma: mamá estás ahí - tocó la puerta de cubículo - te están buscando para los ensayos.
Fer : ya voy mi vida - tras escuchar que la joven abandona el sanitario, está regreso a donde estaba Mayte - que te quede claro María Teresa que tú -la tomó por cintura girándola y pegándola contra ls pared - solo mía entendiste -
La rubia asustada asintió

Ante lo ocurrido mayte se colocó una sudadera cabe color nude, al ver a su amiga salir en estado de shock de los baños no pudo evitar acercarse y ver que pasada .
Ivonne: May estás bien, - la rubia salía del ensayo de golpe, Ivonne al ver salir a Fernanda atrás de ella en el baño supo de inmediato que algo había pasado, Ilse al notar esto también decidió seguirla para encontrarse a mayte llorando junto al coche de esta última, ambas mujeres la abrazaron e intentaron tranquilizarla.
May: la amo, pero su amor me está matando, -la rubia decía a sus amigas.

Ilse al notar las palabras de May decidió mostrarle algo que había comprado y que era una sorpresa.

Holis mis Mayferitos los amo mucho bb