Cap. XVIII enfrentemos el dolor

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El sol besaba el rostro de Mayte que dormía abrazada de Daniela en el sillón, esta última al notar su despertar la abrazo más fuerte.

May: Esto es una pesadilla verdad - Dani solo le dio un beso en la frente mientras que May solo dejaba caer unas lágrimas por su mejilla.
Daniela: mi niña ya no llores, te hará mal.
May: que mal podría hacerme, si tengo el corazón hecho pedazos.

En la cocina de la Zabaleta, Lucero y esta cocinaban, Mijares ponía la mesa e Ivonne le preparaba el baño a May para que se relajara un poco antes de probar bocado, todo en un acto de solidaridad cancelaron su agenda.
Joe y Montse ignorantes de los hechos ocurridos un día antes se encontraban en aquella famosa casa productora eran abordadas por la morena.
-saben algo de May - les preguntó a ambas chicas, estas solo respondieron con un no, después de un largo rato, Montse recibió una llamada de Susa, esta le informa Joe que irían a casa de esta al salir.

Montse: No sé, pero Susana quiere que vayamos, ahí está May - cito mientras se maquillaba - solo me dijo que no le digamos a Fer y menos a Isa.
Joe: que raro, pero si Susa lo dice es por algo - ninguna noto que en la puerta del camerino escondida se encontraba la morena.

Al caer la tarde en la residencia Zabaleta después de que las chicas fueran informadas de aquel suceso que dejó a su amiga con el alma rota, la poco armonía fue disipada por un llamado a la puerta.

Susana: ¡voy! - los golpes eran cada vez más desesperados - ¿quién? - abrió la puerta antes de obtener respuesta, debido a la insistencia , - Fer, ¿qué haces aquí?
Fer: vine hablar con Mayte - ante lo dicho la cara de sorpresa de la anfitriona fue sustituida por una de enojo.
Susana: aquí no está - intentó cerrar la puerta, la morena a empujones entró a la residencia.

Los gritos de la morena con su nombre invadían la residencia - ¡MAY, MAY! - ante la situación la nombrada decidió hacer frente a lo ocurrido.

May: aquí estoy - se plantó en medio de la sala, mientras que todos los presentes miraban la escena, cruzó los brazos - ¿qué quieres ? , anda habla que no tengo tu tiempo ni las ganas de escucharte.
Fer: May no es lo que piensas, él no significa nada, solo es un error, tú eres el amor de mi vida, solo no se que me pasó, el no era nada serio - explicaba acelerada y buscaba de forma desesperada la mirada de la rubia.
May: tu forma de amar es rara, duele y una vez una sabia personita me dijo que el amor no duele, no es serio pero desde hace meses estás con él- miró a la pelinegra y está le respondió con una semi sonrisa forzada, la morena al notar esta acción.
Fer: Ivonne, siempre Ivonne - exclamó molesta y con un tono ligeramente golpeado, - ¿por qué siempre te metes? - miró a Ivo con desprecio.
May: ni se te ocurra meterla, que aquí la que falló fuiste tú - la morena intentó acercarse y abrazarla, ante esto el rechazo de May era evidente.
Fer: May porfavor escúchame, solo estoy confundida, los amo a los dos, ¡TE AMO! - con un tono de voz alto y desgarrado en llanto pronunció lo último.
May: decir te amo, no es amar, un amor dividido no es amar, ya veo que es claro que perdí cuando me dejé a un lado por ti, me duele más que negué mi realidad, simplemente traté por las dos y ya no puedo más - todos estaban atónitos antes las palabras y postura de May - dicen que el amor es ciego y contigo lo confirme, volví contigo y me falle, te di todo y me cansé de intentar, me equivoqué, pero de los errores se aprende, vete y no vuelvas María Fernanda.

La morena se acercó y le dio un beso, un beso que desbordó las lágrimas de la rubia, - Te amo May - salio del sitio; Joe se acercó a la bajita abrazándola, - May, te quiero, las quiero a ambas, se que estás en buenas manos pero tampoco puedo dejar que ella se vaya así, espero entiendas - está asintió, Yolanda salió tras Fernanda, Montse decidió seguir a Joe.

Joe: Fer espera - corrió deteniéndola, - dame las llaves no puedes manejar así - la morena se negó - no te estoy preguntando.
Montse: Fer, Joe tiene razón mira como estas, no puedes manejar así vamos - está le dio las llaves a Joe emprendiendo rumbo a casa de Fer.

(Fin del flashback)

Paloma: mamá te pasaste y mucho - miró a su madre con una ceja alzada.
Fer : lo sé - en estos momentos la vergüenza era lo único que habitaba en su ser.
Paloma: es que igual mamá, le pusiste los cuernos, le sales una excusa malísima y encima le hechas la culpa a Ivonne, ahora entiendo porque en las entrevistas Ivonnes no puede escuchar ni tú nombre.

Por otro lado en la casa de May, la plática para este punto era muy fuerte y a diferencia de los exaltos de Paloma, Ilse escuchaba con toda la tranquilidad.

Ilse: me acuerdo ligeramente de esa vez en el cine, solo recuerdo que Ivo estaba insorporable y ahora entiendo porque - la rubia tenía su cabeza en el regazo de la güera mientras esta le hacía mimos, algo húmedo escurrió por su pierna, Ilse al notarlo supo que era - llora mi May, saca todo, tienes tanto dolor que necesitas sacarlo.

Una silueta interrumpió el momento y unos ruidos en la cocina distrajeron el momento, ambas se miraron y fueron a explorar el origen;
L nevera se encontraba abierta y una pijama de unicornio invadía este.

May : Valentina - dijo cruzada de brazos, está al escuchar su nombre dio un leve salto, saliendo de la nevera con un paquete de chocolatines sostenido co la boca, en la mano un paquete de fresas con chocolates y en la otra uno un bote de jugo, Ilse al ver la escena decidió aguantarse la risa - jovencita son más de la una de la mañana, no debería ni siquiera estar despierta suelta eso, - Valentina miró a su madre de forma traviesa con su pie se ayudo para cerrar la nevera y sin dudarlo huyó de sitio, May miro a Ilse y está supo lo que está quería, ambas corrieron hasta la joven en un intento inútil de atraparla pues llegar a su habitación puso seguro haciendo inútil los intentos de su madre por entrar - pero vas a salir jovencita - exclamó la rubia dándose por vencida,
La güera no pudo evitar reír un poco.
Ilse: ya no estamos para estos trotes May - la rubia asintió con una risa cansada, se había olvidado de lo que estaba pasando y es que ese era el mayor poder de su pequeña, hacerle olvidar todo lo malo.
May: volvamos a la sala - la güera asintió.
Ilse: oye May, me permites un momento - May asintió bajo las escaleras, pero decidió quedarse a la mitad para esperar a esta, Ilse por su lado decidió acercarse a la puerta de la joven y tocar de forma tranquila, - Princesa - escucha un ruido que le dio a entender que tenía la atención de la Valentina, - mi niña no comas muchos dulces solamente para que mamá no se preocupe, por cierto guárdame fresas, la amo - la mujer dio unos pasos separándose de la puerta, antes de alejarse la puerta de la habitación se entre abrió, la mujer volteo de forma intuitiva para encontrar el brazo de Valentina de fuera con un paquete de fresas que contenía la mitad de estas, Ilse al notar esto sonrió, las tomó y le dio las gracias, la rubia presenció todo y no pudo evitar sonreír, su hija tenía un único defecto, no compartía sus cosas, comida o cosas muy personales, era raro que interactuara con alguien que no conocía, sin embargo Ilse lo había logrado.

Mis Mayferitos les prometo que ya casi salimos de momento shock emocional, lo amo

La historia de un amor (Mayfer)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora