Cap. LXXXI. Terrorismo Emocional part. 2 "simplemente amistad"

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Aquel día caótico llegaba a su fin, la alta de preparaba para lo que sería su juicioso.
Pues al día siguiente tendrían ensayo pero esta vez para las nuevas coreografías.

Su corazón latía a mil por hora, no podía evitar sentir náuseas de los nervios, en aquel conocido studio de danza donde muchas veces se habían reunido antes, un lugar conocido y que esta vez no sentía seguro, sabía por el grupo de WhatsApp donde todas se comunicaban que ya estaban ahí, solo estaban a la espera de su llegada y en verdad se mostraban un poco ansiosas por verla, pues tras días de negarse a este encuentro, por fin sabrían que ha sido de ella.

Fer: Ila, ¿cómo sigues? - preguntaba en un tono amigable y sereno..
Isa: Bien gracias - respondía en un tono cortante, cosa que hería un poco a la morena.
Fer: Ila, porfavor, tenemos que hablar - la mujer ponía los ojos en blanco con evidente fastidio.
Isa: de que, de cómo jugaste con mi hermana y de paso arrastraste a mi sobrina - Fernanda contenía sus lágrimas, pues sabía que era momento de ser valiente, encarar a Isabel y poder luchar por Mayte plenamente - ¿Has escuchado de esos sujetos que dan la vida con tal de llevar a cabo su hazaña de destrucción masiva?, lanzan las granadas, tirotean estaciones,
crean choques, derrumban edificios con el avión
donde ellos van a bordo, unos despiadados maestros de la tortura, sin temor a la muerte
aficionados coleccionistas de llantos, que se creen con el derecho de robar la vida por capricho, - alzaba una ceja al decir todo - ¿quién quisiera toparse con alguien así? - la miraba de arriba abajo - con un terrorista emocional - la morena en ese momento respiro profundo y se por primera vez, en toda su existencia supo que era defender lo que amaba.
Fer: ¡No soy una terrorista emocional! - susurro con algo de fuerza - estoy loca, eso sí, enferma de algo que me hace perder los estribos, fui estúpida al no aceptarlo a tiempo, por no medicarme, entre mis tonterías y negación me llevé a May y mi hija en el camino, pero las amo Ila - su voz se quebraba al pronunciar la última frase, su rostro comenzaba a desencajarse y una morisqueta de dolor genuino salía a flote, - la amo como no ame, no es desea, de eso estoy segura, porque cuando veo a May siento que tiemblo, que mi corazón se hace chiquito, no puedo estar tranquila y solo busco sentir su mira o cualquier rose - su voz llorosa sorprendía a la castaña - en cuanto a Valentina, ella, - tomaba aire, si cabeza se hacía ligeramente para atrás - ella es como el cielo, aveces quisiera tejerme alas para volar a su par, se que le hice mucho daño, porque está irreconocible últimamente, pero Ila, no te miento que cuando te digo que su vida vino a darme sentido, nunca imaginé amar de esta manera - recordaba muchos momentos al lado de su hija, esto la hizo suspirar y sonreír inconsciente, su rostro vino a su mente y sin darse cuenta en un leve susurro pronunció - que bueno ser tu mamá - todo esto había logrado conmover el corazón endurecido de Isabel.
Isa: ¿porque la dañaste tanto? - preguntaba al borde de las lágrimas.
Fer: por cobarde, por miedo al que dirán, simplemente cobardía - lloraba a rienda suelta
Isa: no estaban solas Fer, todos las hubiéramos apoyado, hasta mis papás, mi mamá adoraba a Valentina, ¿por qué? - la morena se acorralaba y se daba cuenta que su accionar no tenía justificación.
Fer: no se - la morena se imhincaba frente de Isabel - pero por lo que más quiera Isa perdóname - se aferraba a sus muslos llorando desconsolada, esto comenzaba a llamar la atención de las demás presentes, entre ellos Mariana, la coreógrafa - perdóname, no me pidas que me aleje de May y Vale, me voy a morir - pronunciaba entre sollozos - pedirme dejar de respirar o latir es más fácil - Isabel se quedó muda ante todo esto, solo le levantó el rostro secando sus lágrimas y abrazándola.

Por otro lado las otras tres integrantes presentes comenzaban a murmurar entre ellas.
Ilse: ¿qué crees que pase Ivo? - la pelinegra bufaba incrédula.
Ivonne: Fernanda victimizándose - estas palabras disgustaban profundamente a la rubia.
May: ¿es enserio? - cuestionaba a su esposa por lo dicho, está solo encogía de hombros - no puedo creerlo - cruzaba los brazos - enserio no puedes tener ni un poco de empatía.
Ivonne: ¿empatía? - miraba a su mujer, esto la hizo enfurecer - empatía por quien, por ti, por mi o por ella - pronunciaba con una risa sarcástica.
Ilse: Ivo, cálmate, ven vamos - intentaba sostenerla y sacarla del lugar pero esta se soltaba.
Ivonne: no me voy a ningún lado, estoy harta Mayte, estoy harta de ser tu estúpida favorita - Fernanda d Isabel que habían escuchado los tonos elevados de voz ya estaban junto a ellas - ¿empatía? - preguntaba entre sarcasmo y enojo - empatía por la mujer que siempre te hizo llorar, que te engañó, que negó a tu hija y le deseo la muerte al otro, empatía por la que más de una vez te alzó la mano, empatía por la que me ha insultado miles de veces, estoy cansada.
Ilse: Ivo vamos, esto no te hace bien - la güera la abrazaba al verla colapsar en llanto.
Ivonne: estoy cansada de ti, de ella, es esto, estoy casada de ver como eres mi esposa y te revuelcas con tu ex - la rubia le daba una bofetada, mientras que la pelinegra ponía la otra mejilla - anda pégame de nuevo - señalaba el otro lado - no sería la primera vez que me alzas la mano por decir la verdad - Isabel se interponía.
Isa: ni se te ocurra María Teresa, que por más que Fernanda esté arrepentida, Ivonne no a dicho más que la verdad, te ha apoyado en todo, te ayudó cada que Fer te engañó y perdón negrita pero sabes que es verdad - miraba a la morena - te seco las lágrimas, cuido de ti, de mis sobrino, porque hasta ese ángel que tienes en el cielo dio todo por el - la rubia giraba la mirada intentando ignorarla - a no Lascuráin, a mi no me ignoras, ¿para que caramba le pediste que sea tu esposa?, porque tú empezaste el relajito de casarte con ella esta vez, ¿para esto, para ponerle el cuerno?
May: yo, yo - tartamudeaba.
Isa: tú nada May, te amo mucho Chi, pero te estás pasando con tu esposa - la pelinegra se cruzaba enfrente de Isabel, miraba May de frente, le tomaba la mano y le entregaba su anillo de bodas.
Ivonne: ¡EX ESPOSA! - pronunciaba cada letra con firmeza.
May: no Ivonne, mi amor, perdón, Iv...

La historia de un amor (Mayfer)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora