Cap. XLVII el nacimiento de una valiente

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Ilse: se puede pasar - abría levemente la puerta y asomaba la cabeza, solo podía a observar a Vale encogida de rodillas, está al verla secaba rápidamente un par de lágrimas que recorrían su mejilla - no está mal llorar, lo que está pasando no es fácil y ... - una dulce voz quebrada la impterrumpia.
Valentina: podrían dejar de tratarme así - agachaba la cabeza.
Ilse la miraba desconcertada - ¿así como? - la joven la veía, el coche de azul y verde la hizo quedarse inerte.
Valentina: así como una niña, no lo soy, me doy cuenta ya tengo 15 años, se perfectamente lo que pasa, se que mi madre es la otra mujer, que yo soy la hija bastarda de la cual mi otra madre reniega, tengo redes, veo como presume a sus otras hijas mientras yo estoy en la sombra, no soy una niña, ya me doy cuenta de todo, pueden dejar de tratarme así, intentar protegerme de lo que es evidente, soy una bomba de tiempo que en cualquier momento saldrá a la luz, no pueden seguir pintándome el mundo como un cuento de hadas - escuchar esas palabras sorprendieron a Ilse.

Ilse: solo intentan que no sufras - se sentaba en la cama
Valentina: de todas formas me enteraré por mi cuenta y será peor - miraba a la mujer a su lado, esta solo la veía con ternura y compasión - míreme - esto hacía que Ilse reaccionara y la viera a los ojos, mientras Valentina se ponía pie y miraba a la ventana, esta le daba una vista a la mujer - parezco una niña.

Ilse: solo intentan que no sufras - se sentaba en la cama Valentina: de todas formas me enteraré por mi cuenta y será peor - miraba a la mujer a su lado, esta solo la veía con ternura y compasión - míreme - esto hacía que Ilse reaccionara y la vie...

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La imagen ponía nerviosa a Ilse.

Ilse: aún eres una niña Valentina, tienes 15 no quieras crecer antes de tiempo - suspiraba - mamá necesita saber que estás bien para que ella esté bien.

En la planta alta la tensión estaba en su máximo punto, Gabriela y Lucia habían decidido refugiarse en la cocina.

May: que carajos le pasa - gritaba - ¿por qué diablos beso a Mimi? - la pelinegra se pegaba a la pared buscando ayuda de las dos huidas mujeres- ¿por qué me hace esto? - al escuchar los gritos la güera bajó corriendo junto con Valentina, ambas intentaban calmar a la rubia, un intento inútil - mi amor sube a tu cuarto no quiero que me veas así - se cubría intentando esconderse de su hija.

La joven tomó a su madre con rapidez y se sentó en el piso jalándola hacia ella, la abrazó con fuerza y empezó a respirar con profundidad su madre muchas veces la había calmado de esa manera y ahora ella replicaba lo aprendido.

(Flashback)

9 de Mayo del 2009, Mérida Yucatán

La sala de partos era un caos, la pelinegra estaba hecha un Mar de nervios, caminaba de lado a lado intentado calmarse.
Dr: Familiares de la señora Lascurain - Susana, Lucero, Daniela y Adal alzaban el rostro, Manuel e Ivonne se acercaban al médico.
Manuel: nosotros, nosotros somos su familia doctor - miraba a todos ahí.
Dr: supongo que usted es el padre - lo miraba cuestionándolo, este negaba - bueno , necesitamos que el padre o pareja de la señora pase a la sala de partos para darle apoyo.
Manuel: ella - señalaba a Ivonne - ella es su pareja - el doctor la miraba.
Ivonne dudosa de su respuesta - si yo soy su pareja, el bebé es mío, es producto de un invitro - este insatisfecho con la respuesta le pidió que lo acompañara, le entregó ropa para el quirófano y de inmediato entraron a la sala de partos.

La historia de un amor (Mayfer)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora