5

7 0 0
                                    

Han pasado dos años más. Dos largos, insoportables años. Más de la mitad de mis secuaces, aquellos que alguna vez fueron mis fieles subordinados, ya han salido de este maldito lugar. Incluso varios de esos otros miserables que fueron detenidos por Mistery Inc. han recuperado su libertad. Pero yo sigo aquí, atrapado en este cuerpo pequeño, incapaz de crecer, de cambiar... de ser lo que alguna vez fui.


No entiendo por qué sigo así. ¿Por qué no crezco como un perro normal? Esa pregunta me carcome día y noche. No hay nadie con quien pueda hablar, nadie en quien confiar. Así que, en mi soledad, he empezado a buscar respuestas por mi cuenta. Paso horas en la biblioteca de la prisión, un lugar que la mayoría evita. Los libros de leyes, con sus páginas polvorientas y lenguaje incomprensible, no me ofrecen ninguna esperanza. Pero no es ahí donde encuentro lo que busco.

Hoy, mientras exploraba estantes que casi nadie toca, me topé con un libro diferente. Un libro de leyendas. Al principio no le presté mucha atención, pero algo en su título me llamó la atención. Comencé a leerlo, pasando páginas sin detenerme, cada palabra resonando en mi mente como un eco distante.

Y entonces, lo encontré. Un pasaje, una historia que hablaba sobre los orígenes del Daemon Ritus. Mientras leía, mi corazón comenzó a latir más rápido, una sensación de ansiedad mezclada con miedo recorriendo mi cuerpo. Pero cuando llegué a cierto punto, algo me golpeó como un rayo.

Un detalle... un detalle que nunca hubiera imaginado. Me quedé sin palabras, mis pensamientos enredándose en una maraña de confusión y terror. Pero ahora lo sé. Ahora sé que hay algo más grande, algo más oscuro detrás de todo esto. Algo que ni siquiera yo había considerado...

VolveréWhere stories live. Discover now