En las profundidades de las cuevas más oscuras y antiguas, allí donde la luz nunca ha tocado, habita una criatura conocida como el Neóbakteron. Esta abominación es una fusión retorcida entre la bacteria insaciable de los Backrooms y la voracidad depredadora de un neomórfido. El resultado es un ser aterrador que no necesita alimentarse para sobrevivir, pero que devora cualquier cosa que cruce su camino, guiado solo por una compulsión imparable de consumir.
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El Neóbakteron es una figura humanoide esquelética, de un color pálido y húmedo que parece brillar con un extraño resplandor. Su piel translúcida deja ver un entramado de venas y órganos que nunca descansan, adaptándose constantemente para procesar cualquier material que ingiera. Su cabeza es alargada y carece de ojos, aunque puede detectar el movimiento y el calor de sus presas con increíble precisión. Al abrir su boca, se revela una serie de dientes irregulares, como los de una criatura marina, y una lengua bífida que utiliza para explorar su entorno y alcanzar a sus víctimas.Hábitos y Comportamiento:
El Neóbakteron es un ser eminentemente adaptativo y resiliente. Aunque su naturaleza le permite subsistir sin alimento, se mueve por las cuevas en busca de todo tipo de materiales, desde rocas y vegetación hasta carne, huesos, metales y plástico. Su organismo posee una enzima corrosiva que le permite disolver casi cualquier sustancia. Al consumir, no lo hace por necesidad, sino por puro instinto, como si la combinación de sus dos naturalezas impulsara una eterna ansia de destrucción y consumo.Relación con su entorno:
La cueva se convierte en un territorio de caza y en un campo de terror para cualquiera que se atreva a adentrarse. Las paredes, frecuentemente marcadas por las garras y los restos digeridos del Neóbakteron, son una advertencia muda de la presencia de esta criatura. Sus presas, aunque varían desde pequeños animales hasta intrépidos exploradores, rara vez logran escapar. Si alguna criatura, incluso un humano, intenta huir, el Neóbakteron despliega una velocidad sorprendente y una agresividad brutal que lo lleva a lanzarse sobre su víctima sin dudar.Según las historias locales, el Neóbakteron no es una simple criatura, sino una maldición hecha carne, que permanece en las profundidades, esperando a aquellos que se atreven a desafiar los misterios de la cueva. Las pocas personas que han sobrevivido a su encuentro hablan de susurros inhumanos y una sensación de vacío que invade el ambiente cuando la criatura está cerca. Es una presencia oscura que no puede ser saciada y que existe solo para consumir y aterrorizar, dejando a quienes logran escapar con un miedo perpetuo a los espacios oscuros y confinados.
En las noches más oscuras, algunos incluso aseguran que pueden escuchar su respiración sibilante en el eco de las cavernas, como si el Neóbakteron siempre estuviera buscando su próxima presa.
La Leyenda del Neóbakteron
Un grupo de cuatro amigos, entusiastas de la exploración de cuevas, decidió aventurarse en una red de túneles conocida como El Laberinto de las Sombras, ubicada en las montañas, pese a las advertencias de los lugareños. Historias de desaparecidos y rumores de una criatura aterradora envolvían el lugar, pero ellos pensaban que solo eran cuentos.
Eran Víctor, Laura, Sergio y Ana, quienes comenzaron la exploración con risas y charlas despreocupadas. A medida que avanzaban, el ambiente se tornaba denso, como si las paredes de la cueva absorbieran el sonido. Tras varias horas, encontraron una cámara amplia con un hedor fuerte y desagradable. La linterna de Víctor iluminó algo en el suelo: huesos quebrados y rastros de lo que parecía ser sangre seca. Nadie dijo nada, pero la tensión era palpable.
De repente, Ana sintió una extraña presión en el aire, como si alguien o algo los estuviera observando. "Creo que deberíamos regresar," susurró, pero antes de que pudieran reaccionar, un sonido profundo y gutural resonó a sus espaldas. Laura giró la linterna, y entre la penumbra apareció el Neóbakteron.
Era una figura alta y deformada, con una piel grisácea y retorcida. Sus dientes filosos relucían, y una especie de baba viscosa caía de su mandíbula mientras avanzaba hacia ellos. Sergio gritó y comenzó a correr, los demás lo siguieron en pánico, sin mirar atrás.
Mientras corrían por el túnel, Sergio tropezó y cayó. Víctor intentó ayudarlo, pero en un instante, la criatura estaba sobre Sergio. Sin poder hacer nada, los otros tres escucharon un grito desgarrador que se desvaneció en el eco de la cueva. Sin tiempo para procesarlo, continuaron huyendo, con los latidos de sus corazones resonando en sus oídos.
Víctor, Laura y Ana lograron llegar a una estrecha abertura donde la criatura parecía no poder seguirlos de inmediato. La respiración de Laura era agitada, mientras Víctor intentaba pensar en un plan, aunque ambos sabían que estaban atrapados. Decidieron seguir adelante, esperando encontrar una salida alternativa.
La tensión era insoportable. Ana sentía que algo viscoso había caído sobre su hombro y, cuando miró, vio una gota de la baba de la criatura, que había encontrado una forma de seguirlos, arrastrándose por las paredes del túnel. Víctor gritó, empujándola para que corriera, pero en su pánico, Ana se desorientó, terminando en un callejón sin salida. Con horror, observó cómo la criatura se abalanzaba sobre ella. No quedó nada más que el silencio.
Solo quedaban Víctor y Laura, quienes ya estaban sin fuerzas y agotados. Laura, con lágrimas en los ojos, le rogaba a Víctor que no la dejara sola, pero en un momento de desesperación, Víctor corrió, dejando a su amiga detrás. La criatura siguió a Laura, y con otro grito de dolor, el eco de su voz desapareció en la oscuridad.
Víctor, por fin, encontró una pequeña abertura en la roca que lo condujo a una salida. El aire fresco llenó sus pulmones mientras salía al exterior. Alguien lo encontró vagando sin rumbo y en estado de shock. En el hospital, repetía una y otra vez sobre "el monstruo en la cueva" que devoró a sus amigos.
Desde entonces, la leyenda del Neóbakteron se ha mantenido viva en la región, con algunos diciendo que sigue acechando en la cueva, esperando que alguien más entre para nunca salir.
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muchas historias de terror.
Paranormalson muchas historias de terror en un solo libro, pero puede haber historias que se conecten. Pero recomiendo leer como lo he puesto