En un pequeño pueblo cubierto por la niebla y la oscuridad de las noches frías, existía un restaurante conocido como Ramiza's Musical Pizzeria. Desde su apertura, el lugar se hizo famoso por su ambiente alegre y la pizza especial de cerdo que muchos viajaban kilómetros solo para probar. El local estaba lleno de luces brillantes, carteles de colores y melodías musicales que provenían de un piano en el centro, tocado por Ramiza la Pingüina. Cada noche, los niños se sentaban alrededor de ella, escuchando sus dulces canciones mientras disfrutaban de su rebanada de pizza.
Sin embargo, cuando el sol se ponía y la última luz se apagaba, una oscura transformación ocurría. Los animatrónicos de Ramiza's, una banda peculiar de criaturas, cobraban vida, pero no para entretener a la gente. Rynoth el Rinoceronte, con su teclado electrónico, emitía melodías extrañas que se distorsionaban en el aire, resonando en los pasillos como un eco sordo. Vasily la Comadreja Rusa, con su sombrero tradicional, cantaba una melodía cautivadora, pero sus ojos brillaban con malicia y sus cánticos nunca parecían terminar. Bestru la Avestruz, tocando su banjo con manos erráticas, golpeaba las cuerdas con furia mientras la luz de la luna iluminaba su figura grotesca. Y Randy el Mapache, con su sombrero de explorador y bombos en mano, marcaba el ritmo de una sinfonía que nunca dejaba de sonar.
El dueño original de la pizzería, Ramiza, había sido una chef brillante, famosa por sus platos innovadores y su habilidad para crear pizzas irresistibles. Pero la historia de Ramiza tenía un lado oscuro. Nadie sabía que, al caer la noche, ella había comenzado a experimentar con extraños ingredientes, buscando algo más allá de la gastronomía: un poder más grande que le permitiera mantener su negocio próspero. En su desesperación, hizo un trato con fuerzas oscuras, sellado con sangre.
Los animatrónicos, creados para entretener a los clientes, fueron poseídos por las almas de quienes desaparecieron en las sombras de Ramiza's, almas atrapadas entre el mundo de los vivos y los muertos. Cada uno de ellos cargaba un fragmento del alma de una víctima, y con el paso del tiempo, sus personalidades se distorsionaron, llenándolos de una sed insaciable.
El plato más famoso del restaurante, la "Sinfonía de Cerdo", ocultaba un secreto más siniestro. Cada pizza no solo estaba llena de cortes de cerdo de varios tipos, sino que en las noches más oscuras, un ingrediente secreto era añadido, uno que solo los más valientes o los más ingenuos llegaban a descubrir. Nadie se atrevió a preguntar, y pocos sobrevivieron para contar la historia.
Las puertas de Ramiza’s permanecían cerradas durante el día, pero cuando caía la noche, el restaurante se llenaba de una energía extraña. Nadie sabía lo que pasaba dentro, pero las sombras danzaban en sus paredes, y la música, siempre música, nunca cesaba. Los habitantes del pueblo decían que Ramiza nunca se fue. Que su alma aún rondaba en los pasillos del restaurante, unida a los animatrónicos, buscando más almas para alimentar su creación.
Ramiza's Musical Pizzeria ya no era un lugar para disfrutar de una buena comida. Era un santuario de terror, un lugar donde las notas musicales se convertían en gritos, y las pizzas se servían con un toque de muerte. Y mientras el piano de suelo seguía tocando su melodía macabra, las almas atrapadas, junto con Ramiza, seguían esperando a los próximos visitantes, ansiosas por añadirlos al menú.
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muchas historias de terror.
Paranormalson muchas historias de terror en un solo libro, pero puede haber historias que se conecten. Pero recomiendo leer como lo he puesto
