C i e n t o v e i n t i s e i s

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POV Johanna

Con todas las fueras del mundo finalmente logré subir a donde se encontraba la cubeta atada.
La rama era algo inestable y tenía miedo de caerme.
¿Qué es mejor yo caerle encima a Camil o él alimento para aves?
Yo digo qué ambos.
Tuve qué estirar mi mano hasta donde estaba la cuerda.
Ya qué la rama se movía demasiado, y mi mano temblaba demasiado al intentar cortar la cuerda, para qué las malditas tijeras se pusieran de roñosas y no quisieran cortar, tuve qué usar los dientes pero finalmente la cuerda se rompió, y cayó en su objetivo, la Camaleón.
Me sujeté a la rama con todas mis fuerzas para no caer, levanté la mirada y vi a Avril a lo lejos haciéndome una seña conocida como Estúpida ya bajate de ahí, idiota
Después supe él por qué hizo la seña, Ían estaría pronto a llegar ahí.
Y un acto de distracción de él, logré bajar del árbol y correr.
Avril y yo llegamos al mismo tiempo a Starbucks y dentro de él, al sentarnos en la misma mesa donde estaba Matthew esperándonos, comenzamos a reír.
Matthew al se nos quedó viendo raro.

—Riete Matthew, engañamos a ese tonto —choqué los cinco con Avril y seguimos riendo

Él solo sonrió conteniendo la risa. Después brindamos con un vaso de café nuestro triunfo a pesar de la intervención de Ían.

—¡Lo logramos chicos! ¡Y esto es solo él comienzo! —dijo Avril, quien  le tomó a su café para después volver a hecharse a reír



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