El Fantasma de mi WhatsApp

O c h e n t a y s i e t e

POV Ían

Estaba nervioso, por fin me encontraba frente al departamento #10-A, no sabía aun que le diría a Camil exactamente, estuve ensayándolo durante todo el camino hasta acá, y más que eso, era ilógico que tuve todo un año para pensarlo bien, y no sabía que decirle.
No sé cuanto tiempo estuve frente a su puerta pero finalmente decidí que lo mejor para ambos sería hablar con naturalidad. Explicar las cosas tal cual eran, pero antes de eso, debía conseguir de una manera pacífica hacer que Camil quisiera escucharme. Sería difícil, pero ya nada tengo que perder. Inhalé, exhalé y toqué el timbre una vez, al no ver respuesta, toqué otra vez y otra y otra y otra vez. No había respuesta. Pensé en tocar en el apartamento de al lado, quizá Camil se encontraba en el apartamento de su prima Lauren.
Así que toqué el timbre en ese apartamento. Me abrió una chica de piel caucásica, de ojos marrón y cabello ondulado supuse que ella era Lauren.

—Hola ¿Qué se le ofrece?

—¿Lauren?

—Sí, soy yo ¿Quién es usted?

—Soy él...ex novio de tu prima

Miró con cara de sorpresa.

—Ah, Ían. El chico que amenaza por teléfono a chicas que lo único que quieren es proteger a sus primas. Sí, ya sé quién eres.

—Disculpa mi comportamiento de aquel y día y la molestia, pero necesito hablar con Camil urgentemente.

—¿Y para qué quieres hablar con ella?

—Necesito explicarle lo que desde hace un año debí de haberle explicado.

—No creo que puedas hacer eso ahora.

—¿Por qué no?

—Por qué Camil a esta hora ya de encuentra a kilómetros de Gothenfeld.

—¡¿Qué?!

—Sí, ella ya no está aquí, se fue.

—¡¿Pero a dónde, por qué, como, cuando?!

—No te diré a dónde ni el por qué. Lo único que si te puedo decir es que se fue hace un par de horas.

—No puede ser, llegué muy tarde de nuevo

—De todas formas Camil ya no siquiera está interesada en ti.

—Eso solo lo creeré cuando me lo diga ella. Seguramente le dijiste que vendría y por eso se fue.

—No fue por eso, yo no le dije nada. Fue por cosas de trabajo que se fue.

—¿Volverá aquí?

—Eso no lo sé.

—Bien, de todas formas la encontraré, aunque sea lo último que haga —me fui sin esperar respuesta de su parte.

No puede ser que Camil se me haya escapado de nuevo ¿Y ahora dónde estás Camil, dónde?
Tengo muy en cuenta que en estos momentos ella podría estar en cualquier parte.
Debía seguir buscando, de nuevo volví a donde comencé, a nada.
Por lo pronto lo que debía hacer era volver a Nashville.