El Fantasma de mi WhatsApp

C i e n t o v e i n t i s i e t e

POV Avril

[...]

—¡Atención chicos, atención! —exclamé, ya qué Johanna y Matthew no me hacían caso

—Ya habla Avril ¿Para qué nos citaste en tú casa?

—Los cité a ambos por qué esto es una junta urgente ¡Necesitamos ideas! Por qué a mi ya se me agotaron, soy la única qué aporta ideas hasta ahora. Piensen ¿qué más podemos hacer.

Sentía mi garganta seca, así qué tomé de mi botella de agua. Antes de continuar hablando.

—¿Qué tal rendirnos? —dijo Johanna, qué no dejaba de dar vueltas en la silla giratoria de mi escritorio.

Lo qué dijo hizo qué él agua qué bebía fuese expulsada de mi boca.

—¡¿Qué?! ¡¿Pero te has vuelto loca o qué?!

—No, solo qué ya no se nos ocurre nada

—¿Tú qué opinas Matthew?

—No sé, con tal de perjudicar a Ían, lo qué sea es bueno

—Johanna, ven aquí

Ella asintió, se levantó y caminó hacia donde yo estaba.

—¿Qué ocurre?

—Matthew ¿Nos permites un segundo? Tengo qué hablar con Johanna de cosas de mujeres, espera aquí en lo qué volvemos

—Vale

"Arrastré" a Johanna escaleras arriba a mi habitación. Al llegar cerré la puerta y la ventana.

—¿Qué me tienes qué decir qué no quieres qué Matthew lo escuche? —se sentó en él borde de la cama

—Pasa qué aquí tú amiguito el PlayBoy no coopera, ya no nos está siendo de mucha utilidad como antes.

—¿Qué, de qué hablas? Te hemos acompañado en todas tus locuras durante todo éste mes ¿Y ahora te quejas de qué no nos está ayudando?

—Es que es así, no nos ayuda

—Recuerda qué el sigue creyendo qué a quien queremos perjudicar solamente es a Ían, no a la Camaleón

—Pues creo qué ha llegado la hora de decírselo yo. Por qué no veo qué traigas al PlayBoy loco por ti

—Creo qué ya lo he logrado, pero no estoy segura, ya lo comprobaré luego

—¿Y mientras qué hacemos con él? Solo ha estado saboteando los planes

—Claro qué no

—Johanna —me senté a su lado—. ¿Qué hizo él día qué fuimos al campo de Golf?

—Bueno...

—Yo conducía él carrito de Golf —le interrumpí—. ¿Y él muy idiota qué hizo?

—Vio qué ibas a arrollar a la Camaleón y te quitó él mando de las manos.

—¡Aja! Lo cual provocó qué termináramos en él fondo del estanque

—Pues sí pero...

—¿Y qué hizo en él boliche?

—Vio qué le ibas a lanzar la bola de boliche en la espalda a la Camaleón y él la atrapó con sus manos

—¿Y en la piscina?

—Llamó al salvavidas por qué la aventaste al agua.

—¿Y con él purgante?

—Él muy "listo" las perdió sabe donde

—¿Y en él supermercado?

—Nos sacaron de ahí

—¿Y las abejas?

—Él panal cayó en él agua, gracias a su grandiosisima puntería

—Exacto

—Hasta parece qué quieres matarla

—Solo deshacerme de ella. Pero ya me harté —abrí una de las cajoneras, busqué mi tarjeta American Express—. Es hora del ataque final

—¿Qué planeas ahora Avril?

—Dame una semana para preparar todo, y ya qué tenga todo listo se los diré —abrí la puerta—. Llego la hora de acabar con Camila Pattinson

—¿Y sí Matthew lo impide?

—No lo hará, le seguiremos haciendo creer qué a quién perjudicamos es a Ían

—Pues será lo mejor

—Ahora vayanse, y esperen noticias mías

—Nos vemos luego —cerró la puerta al salir