Capítulo 1. ¿Cómo podre?
Mad.
Al aterrizar camino con las maletas, papá me reservo una habitación en un hotel hasta que su amiga viniera de Nueva York, pero lo que me había dicho antes de partir era que había logrado conseguir una habitación en un apartamento donde tendría que compartirla con otras dos personas, no me dijo quiénes serían, solo que los conocería al llegar allí.
Estaba un poco confundida por esta confesión suya, ¿en qué momento había él encontrado una habitación? No importaba realmente, mi mente estaba en otro mundo como para pensar ahora en aquello. Yo solo tendría que estar tres noches en un hotel hasta que mi papá me enviara la dirección del lugar donde al parecer él enviaría mis cosas.
Así que no importaba mucho donde durmiera, podría ser un apartamento con otros dos universitarios o podría ser con una anciana refinada que odiaba el ruido, la cosa era ahora la razón por la que mi mente bombardeaba con imágenes de Tori muerta, de una Madisson un poco más joven junto a ella matándola y siendo la verdadera culpable.
Me hundo en el taxi y trato de no llorar mientras llego al hotel, pero es casi tan imposible que lo hago, empiezo a llorar sin poder sentirme sana, sin evitar el dolor que recorre cada vena, cada nervio y cada poro de mi ser. Es como un virus que invade mi cuerpo y no me deja en paz, solo me llena de más odio hacia mí.
Todo este tiempo pensando que todos me mentían, cuando era yo la que me mentía a mí misma. Era mi culpa, y esta vez era verdad, no invenciones de mi mente. Por mi culpa, por los celos, por la rabia, por el alcohol y las drogas en mi sistema, por todo esto mis amigos se habían tenido que separar para que yo no recordara que había matado a mi mejor amiga.
-Ya llegamos. -le entrego el billete al hombre y me bajo, entro al hotel y la señora de la recepción me da un cuarto.
Al estar dentro no me fijo mucho si es lujoso, no me fijo en el color de las paredes o el marco de la cama, solo caigo en la alfombra y me derrumbo, sintiendo como todo dentro de mi pesa más de lo real y como me lleva hacia un precipicio. ¿Cómo poder vivir ahora? ¿Cómo podre ahora que perdí a Buster por mi culpa, a mis amigos de la infancia y sé que por mi culpa murió una amiga?
¿Cómo podrá ahora ser todo más fácil?
Es increíble como un nuevo comienzo se convierte en el más oscuro y profundo dolor dentro de ti, yo esperaba olvidarlo todo pero ahora simplemente no puedo hacerlo. No duermo, no salgo durante esas tres noches y cada vez que cierro mis ojos me veo a mi manejando un auto y luego el cuerpo de Tori lleno de sangre.
Aquella imagen hace que me despierte y no pueda seguir más, solo ahogándome dentro de mi propia miseria.
Vuelvo a la misma escena cada noche y me despierto cada vez con el corazón desbocado, el sudor recorriendo mi cuerpo y las lágrimas surcando mi rostro, solo vuelvo el rostro a la almohada pero simplemente temo cerrar mis ojos y volver a verla a ella... muerta.
-hola cariño, ¿Cómo has estado?
-bien, papá. -aunque es una mentira muy grande, no quiero preocuparlo y mentir se hace mucho más fácil por teléfono donde él no puede ver mi aspecto. -aquí las cosas son bastante agradables.
-me alegra mucho oírlo. -se pasa hablando acerca de cómo van las cosas por allá y sobre cómo se encontró con el jefe de la policía, el papá de Carlie, y este le conto que su hija estaba estudiando en la Universidad de San Francisco y su novio había ido con ella.
Eso significaba que Dylan y ella habían vuelto, aunque recuerdo lo que me dijo él en el aeropuerto, acerca de cómo ella le estaba haciendo muy difícil eso de perdonarlo. Sin embargo, ellos parecían bien.
-mañana llegan tus cosas al apartamento, ya hable con la señora que me lo ofreció y pague tu renta.
-papá, te dije que yo buscaría un trabajo y lo haría.
-por el momento te ayudare, pero está bien que quieras trabajar por ti misma. -yo asiento, realmente le agradezco porque ni siquiera he salido de aquí para buscar trabajo.
No he podido y lo único que he sido capaz de comer han sido las comidas que traen del servicio del hotel, que horrible inicio de universidad, por suerte las clases aun tardan otros días más o si no yo estaría destrozada.
-ahora sí, mañana podrás trasladarte a tu nueva habitación. -él me dicta la dirección y le pregunto acerca de quienes serán mis compañeros de habitación.
Me dice que no sabe muy bien, solo que se trata de un chico y la otra habitación aún está desocupada por muy poco tiempo mientras consiguen otro compañero, le insinuó que cómo me ha dejado quedarme con un chico sola pero él dice que confía en mi plenamente.
Realmente me agrada no tener que vivir con la amiga de papá, sé por experiencia que es un poco amargada y odia hasta el sonido de la respiración, así que vivir con otros universitarios hace las cosas un poco más fáciles y entretenidas, solo espero que no sean asquerosos ni tengan manías raras, o se sobrepasen conmigo.
Al otro día salgo con mis maletas y me dispongo a dejar el hotel, en el camino solo pienso, ¿Cómo será la persona con quien compartiré? ¿Tendrá un sueño pesado? Porque últimamente paso mucho tiempo llorando en la noche y no quiero que él se asuste por tener un fantasma llorón en su casa.
Me pregunto cómo estará Hill, como estarán los gemelos y Ryan e incluso, deseo saber que es de Buster, ¿a qué universidad habrá ido? ¿Cómo estará? ¿Ya tendrá una fila de chicas para ir tras él? Aquellos pensamientos se van reduciendo al recordar que simplemente algo es totalmente imposible entre los dos.
Yo estoy demasiado lastimada para perdonarme a mí misma, para pretender olvidarlo todo y comenzar una relación y más con Buster, la persona que me trae tantos recuerdos, simplemente pensar que también le he hecho daño a él me llena de un sentimiento que me hace incapaz de estar con él.
Trato de decirme a mí misma lo contrario, pero Tori invade mi cabeza como una bola de concreto derrumbándolo todo y sé que no habrá aun forma de poder estar con Buster estando del todo sana, y yo no quiero verlo sufrir, no quiero ser esa persona triste que se convierte en su carga. Quiero estar completa para él, sin tristeza, sin remordimientos y sin miedos, quiero que me ame y entregarle mi amor por igual.
En este momento sé que no soy capaz de hacerlo.
-gracias. -me bajo del auto mirando hacia el edificio frente a mí, suelto un suspiro.
Aquí viviré por cinco años hasta terminar mi carrera, y solo me pregunto de nuevo, ¿Cómo será él? Este pensamiento se llena de respuestas indefinidas mientras subo el ascensor y busco el número del apartamento, cuando mis nudillos golpean la puerta y espero, espero a encontrarme con un tipo grande y cabello rapado que parezca boxeador, espero ver a un chico flacucho con gafas que le guste jugar video juegos, espero encontrarme solo con el tipo atlético y coqueto o con el bromista de la clase, con el tímido o posiblemente, con un chico que tenga todas estas combinaciones.
Y cuando abren la puerta, nunca espero encontrarme con un chico demasiado bromista para su bien, muy guapo para hacer que mi mente se quede concentrada en su cuerpo, con aquellos ojos que traspasan cada espacio minúsculo de mi piel y lo más importante, sin camisa.
- ¿Buster?
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y hasta aqui la maraton, espero sus comentarios en los capitulos, ¿les esta gustando? este es solo el primero, ahora se pone más emocionante, estos dos en un mismo apartamento, ¿quien creen que caera primero? Buster o Mad
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Si No Te Amara ©
Teen FictionBaje mis ojos, sin ser capaz de mezclarme con aquel par de esmeralda que brillaban pidiendo ser admirados, no podía, porque verlo era tan doloroso como exquisito, como comer helado cuando sabes que te engordara, como ver una película de miedo cuando...