Jason. © (1º libro) - Editando.

Capítulo 46

-Adrienna... -me doy vuelta y veo a James. Me levanto enseguida y voy hacia él.
-¿Dónde está Jason?. -pregunto mientras reviso que no tenga ninguna lastimadura. Ríe.
-Estoy bien, tranquila. -me sonríe. -Jason está en su oficina y no está nada bien. -hace una mueca. No le respondo y prácticamente salgo corriendo hacia arriba ignorando los llamados de Camillo y James.
No lo dudo dos veces y entro a la oficina de Jason. Lo veo caminar de un lado a otro.
-Jason... -hablo y el me mira, viene hacia mí y me abraza. -¿Estás bien?.
-Si.. -suspira. -mate a uno de mis mejores hombres. -susurra. Eso me hizo sentir culpable.
-Es mi culpa. -le digo cabizbaja. -Si yo no hubiera ido vestida así, él no hubiera hecho eso y ahora estaría vivo.. y-yo.. -me interrumpió dándome un beso, tierno y largo.
-No digas eso Adri. -dijo mirándome a los ojos.
-Pero es así Jason. -suspiré. -Por mi culpa mataste a uno de tus mejores hombres. -insistí.
-Basta. -dijo serio. -Sabes que mataría a cualquiera que te meta mano o te falte el respeto. -lo abracé.
-Por dios Adrienna. ¿Podes dejar de ser tan rápida?. -dijo un agitado Camillo apoyado en el umbral de la puerta. Reí y Jason negó divertido.
-Que buen guarda espaldas, ¿no?. -dice Agostino detrás de Camillo dándole palmadas en la espalda. Mi guarda espaldas gruñe.
-Capaz que necesite otro más. -acota James llegando de la nada.
-¿Quién?. -pregunta Jason. Yo solo miro a los hermanos Gangardi.
-¿Uno de nosotros?. -pregunta Agostino. James frunce el ceño y niega.
-No, los necesitamos con nosotros. -dice Jason.
-¿Gianni Augusto?. -James le dice a su hermano mellizo. Este lo piensa y luego asiente.
-Llamalo. -le dice a Agostino. Mi hermano asiente y se va.
-¿Y yo?. -pregunta Camillo.
-Vos vas a seguir siendo su guarda espaldas al igual que Gianni. -dice James.
-¿Es necesario dos guarda espaldas?. -pregunto.
-Si. -contesta Jason. Me encojo de hombros.
-Mientras que sea simpático como Camillo todo bien. -sonrío. James ríe y Jason hace una mueca.
-Te pongo guarda espaldas porque no puedo estar todo el día atrás tuyo por el puesto que ocupo. -acota Jason.
-Lo mismo digo Adrienna. -dice James. Río.
Iba a decir algo cuando mis hermanos entran con un chico con la piel bronceada, ojos verde esmeralda, pelo marrón oscuro y de estatura más baja que mis hermanos y los Gangardi. Frunzo el ceño.
-¿De dónde sos?. -es lo primero que digo cuando Gianni está al frente mío. Mis hermanos ríen.
-De la baja Italia señora. -me contesta cortés. Asiento.
-Con razón es así- pienso.
-¿Alguna otra pregunta?. -me dice James quién está sentado en uno de los sillones de la oficina. Niego. -Bien.
-Gianni. Te trajimos acá porque vas a ser guarda espaldas de Adrienna junto con Camillo. -le informa Jason a mi segundo guarda espaldas. Gianni asiente.
-¿Cuando empiezo?. -pregunta, ¿entusiasmado?
-Ahora. -dice James detrás de él. Gianni se da vuelta y asiente. Se ve que es de pocas palabras. Vuelve su mirada hacia mí.
-Hola, me llamo Gianni Augusto Brazzioli, tengo 23 años y voy a ser su guarda espaldas de ahora en adelante. -dice sonriendo. Le sonrío de vuelta.
-Hola Gianni, soy Adrienna Ginoccio, tengo 20 años, soy la hermana menor de los gemelos Ginoccio y soy la novia de Jason. -ríe y asiente.
-Ya lo sabía señora, igual, gracias por la información. -río y mis mejillas se ponen rojas. Jason ríe y me abraza por los hombros.
-No me digas señora. -digo frunciendo el ceño. Asiente un poco apenado.
-Adri, todos están acostumbrados a llamar señoras a las mujeres que son novias, esposas o hermanas de sus jefes. -me informa James.
Hago una mueca. -perdón Gianni. -lo miro.
-Si me queres decir señora está bien. Al igual que vos Camillo. -miro a mi otro guarda espaldas. Él asiente.
-No, si queres te llamo, p-por otro.. -lo interrumpo.
-No. -me mira sorprendido. -llamame señora, Adri, Adrienna o como más te guste. -me sonríe, le devuelvo la sonrisa.
-Gracias.
-Perfecto. -dice Jason. -Adri, necesito que salgas un momento. -lo miro frunciendo el ceño. -Anda al parque, quedate en tu pieza o sali de compras con tus guarda espaldas, pero no vengas acá. -asentí no muy convencida.
-¿Está todo bien?. -pregunto preocupada. Los hermanos Gangardi suspiran y se miran.
-Viene nuestro padre Adrienna, y no es muy conveniente que estés acá. No hoy. -me explica mi novio. Asiento.
-¿Es malo?. -pregunto. James suelta una carcajada.
-Mi querida e inocente Adrienna. Él, al que llamamos padre, es la peor mierda que pudo pisar este mundo. -me dice James. -Es uno de los mafiosos más buscados en el mundo, no tiene piedad de nadie. Nunca la tuvo. -continúa. -ni siquiera con nosotros. -dice brusco y con un toque de tristeza.

Mierda, no tendría que haber preguntado.