Capítulo 80: Lo mejor para ti.

2K 220 96
                                    

El día siguiente a la segunda prueba, cuando la cosas al fin parecían calmadas, empeoraron al menos para Hermione al ser tratada como una cualquiera por primero andar con Harry y ahora Krum en un artículo escrito por Skeeter por supuesto. Sin embargo, Orión no mencionó nada sobre aquello, al sentir celos, aunque sabía que eran mentiras, por lo que se limitó a intentar que dejaran de hablar de ella, prometiendo romperle la cara a quien le escuchara decir algo malo de ella.

Sin embargo, las cosas fueron peor días después cuando vio que la castaña recibía un grupo de cartas, y poco después salió corriendo con las manos hinchadas del gran comedor. El rubio ni siquiera pensó en que ella le daría calabazas de nuevo, lo único que necesitaba era saber que había pasado por lo que no tardó en salir corriendo detrás de ella.

— ¡Granger! —le llamó corriendo, pero ella lo ignoró—. Hermione, ¿Qué pasó? —preguntó con curiosidad, pero de nuevo lo ignoró antes de él llegar hasta donde ella y ver que tenía los dedos tan llenos de dolorosas úlceras que parecía que se hubiera puesto un par de guantes gruesos y nudosos—. Maldición, ven te llevaré con Pomfrey...—le dijo, pero ella negó con lágrimas en sus ojos tanto por el dolor de sus manos como él que le provocaba.

— Déjame Malfoy— le dijo antes de él negar y tomarla en brazos arrullándola contra su pecho mientras corría hacia la enfermería sin importarle ser visto por alguien.

— ¿Qué te cayó en las manos? —preguntó furioso.

—Pus de bubo tubérculo sin diluir —respondió en apenas un hilo de voz—. Me odian, dicen que...

— Yo me encargaré— le prometió entrando a la enfermería antes de acostarla en una de las camillas y llamar a Pomfrey con la mano para que le atendiera—. Esto demasiado lejos...

— Ya puedes irte— soltó la bruja sin querer escucharlo, pero él negó mientras Poppy llegaba a hasta donde ellos.

— Le cayó pus de bubo tubérculo sin diluir— le explicó Black a la enfermera con seriedad para luego ella comenzar a tratarla sin él apartarse de su lado.

— Vas a perder una clase— mencionó Hermione cuando Poppy terminó de curarla y ponerle vendajes en las manos.

— Tú eres más importante que mis clases— le aseguró con seriedad haciéndola sonrojar—. Una vez te lo dije y aunque no quieras seguiré cumpliendo mi palabra, voy a cuidar de ti— le recordó sonriendo de lado haciéndola reír, dándole a Orión una pequeña esperanza de que pueda alguna vez perdonarlo.

— Eres un idiota— solo le dijo sonriéndole antes de él tomar sus manos heridas y besarlas con delicadeza.

— No— le contradijo sonriéndole de lado—. Solo te amo.

Los días siguientes a este su amistad se había recuperado por completo, aunque ella aun no terminaba de perdonarlo para comenzar a salir con él. A pesar de que él le había dicho que no había estado con nadie desde que terminó con Delacour, afirmándole no quería a otra que no fuera ella.

Gracias a la compañía y amenazas del rubio al cabo de menos de una semana dejaron de molestarla, sobre todo después de él maldecir un par de chicos de su casa por burlarse de ella. Y asegurarles que si alguien volvía a hablar mal de ella o peor enviarle una carta amenazante recordarían bien que él era el bisnieto del director y podía maldecir a cualquiera sin recibir reprimenda alguna, algo que, aunque no era verdad, le creyeron...

Riley por su parte había seguido visitando la sala de que viene y que va con esperanza de ver algo que antes no había visto. Y en efecto era así solo que no era lo que buscaba. Cansada de aquello y de sus deberes como profesora, decidió ir en las vacaciones de pascuas a casa a descansar un poco, porque realmente lo necesitaba. Había llegado a su quinto mes de embarazo y esto solo le traía un cansancio algo extremo, haciendo que tuviera que reducir sus cantidades de deberes, con la excusa de darle un respiro a sus estudiantes por vacaciones.

La hija de Lord Voldemort [Lucius Malfoy/Sirius Black]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora