La hija de Lord Voldemort [Lucius Malfoy/Sirius Black]

Capítulo 88: Reencuentro familiar.

En cuanto entraron a la habitación de Antheres, esta se calmó de golpe haciendo que el matrimonio Black riera para luego Sirius tomar a la pequeña en brazos. La cual lo observó en silencio.

— Aun no es hora de que coma, y no parece sucia...—comentó Riley mirando la enternecedora escena.

— Solo quiere que la carguen, ¿cierto Tari? —le dijo a la pequeña sonriéndole y haciéndole gestos para que se riera a pesar de que sabía que era aún pequeña para ello.

— Es increíble, mi propia hija te prefiere— bromeó haciéndolo reír antes de ella acercarse a él y besar su mejilla.

— ¿Qué puedo decir?, soy adorable —soltó riendo mientras la recién nacida los veía haciendo pequeños gestos que enternecerían a ambos magos—. ¿Cierto Tari?, eres tan hermosa como tu mami— le dijo a la bebé haciendo sonreír a Riley—. Por eso la adoré en cuanto la vi, me recuerda a la mujer que amo— explicó a su esposa.

— ¿Vas a dejar de ser tan tierno alguna vez? —preguntó retóricamente haciéndolo reír.

— Oh vamos, amas que sea tierno fue de la cama y salvaje en ella— inquirió guiñándole el ojo haciéndola sonrojar—. Vamos a bajar, tenemos que cenar...

Como era de esperarse al bajar Wonky ya había preparado la comida, por lo que Riley no tardó en comenzar a comer mientras Sirius sostenía a la bebé, al él insistir que ella necesitaba comer más que él y que cuando terminara ya lo haría.... Al terminar ambos de cenar subieron a darle un baño a Antheres para luego disponerse a dormir...

Aquella semana fue casi como un sueño para ambos, al despertar en la mañana por Tari le daban de comer, la dormían de nuevo y hacían el amor hasta que volviera a despertarse, para luego almorzar, y repetir la acción por el resto del día. Ya que en el día estaban repuestos, al Sirius de alguna forma hacer que la pequeña durmiera toda la noche. Era casi como cuando se habían casado, solo que sin una plena guerra, haciendo que fuera su pequeño paraíso.

Por otro lado, Sirius volvió dos días después a Hogwarts a explicarle la situación a Dumbledore, el cual para su sorpresa no se molestó, sino que lo vio aliviado de saber que Riley y su hija estaban a salvo en su casa. Otra ocurrencia que le sorprendió a Black fue la rapidez con la que Snape estuvo de acuerdo en decirle a Malfoy que Antheres había muerto, ya que sabía que pondría a su ahijada en peligro si Voldemort sabía de ella. O peor si su amigo intentaba hacer algo para buscarla y verla...

Al terminar la semana en Hogwarts se terminarían las clases, por lo que Sirius fue a buscarlos directamente a la estación King Cross para llevarlos a Grimmauld Place, en donde sus habitaciones ya estaban listas para ser ocupadas por ellos. Mientras Riley se había quedado esperándolos con Antheres en brazos mirándola en silencio.

Mientras tanto Orión había empacado sus cosas la misma noche que Sirius le aseguró que su madre estaba esperándolo, aunque no había querido decirle nada sobre su hermana. Sin saber si era porque le había ocurrido algo o porque Harry no sabía de la bebé, por lo que era imposible que no se mostrara nervioso por ello. Su madre no soportaría la pérdida de un hijo, la conocía lo suficiente como para saberlo, ni siquiera ella podría con ello...

Gracias a estos pensamientos apenas pudo dormir la noche anterior en su habitación, haciendo que la mañana siguiente estuviera completamente agotado durante el desayuno antes de irse. El cual comió en la mesa de los leones.

— Luces fatal— mencionó cierta castaña sentándose a su lado antes de besar su mejilla.

— Apenas pude dormir— explicó el rubio sonriendo sin ganas antes de verla y darse cuenta que la estaba preocupando.