Simon, I miss you (Terminada)

Mi vida no es a tu lado

Una vez estando en la habitación, Simon me recostó sobre la cama y cuidadosamente se posó encima de mí.

-La maternidad te hace ver tan sexy- dijo en un susurro sobre mi oído.

-Simon , no digas tonterías. Pronto me pondré gorda- le dije riendo mientras con mis manos tomaba de su cabello y nos veíamos a los ojos.

-Te amo, no sabes cuánto te amo- besó suavemente mis labios.

-Sí lo sé- tomé su oreja con mi mano acariciándola- porque yo te amo más.

-No - aseguró - yo te amo muchísimo más. Me gusta tanto estar así , cerca de ti, hablar de nosotros y de nuestro futuro- acomodó un mechón que estorbaba en mi rostro detrás de mi oreja.

Simon comenzó a besar mi cuello, lo llenó de húmedos besos que me hacían perder los sentidos, después se pasó a mi rostro y recorrió cada parte de él , dando besos por doquier; en la frente, en la nariz, en las mejillas, en los ojos y finalmente selló el camino de besos dándome uno en los labios.

Poco a poco nos fuimos separando al terminar el beso. Sus ojos estaban viendo los míos de una manera en la que jamás nos habíamos visto. Esto es amor , no hay duda de ello, lo que tenemos Simon y yo es amor puro, más allá del tiempo que nos separó o la gente que intentó hacerlo, aquí seguimos, amándonos, más que ayer, más que hoy, más que siempre.

Simon se movió de lugar, se bajó de mí -que no estaba literalmente sobre mí- me tomó de la mano ayudándome a sentar y también dándome apoyo a quitar la blusa que llevaba puesta, ante lo que de inmediato alcé ambos brazos para yo auxiliarlo a él a eliminar la prenda que cubría mi rostro.

Al quitar la blusa pudimos apreciar que la barriga comenzaba a saltarse de forma poco escandalosa.

-¡Oh Adele , mira!- dijo tocando mi creciente barriga- mira mi amor.

-¿Qué? - pregunté extrañada.

-Mira mi amor , te está brotando la pancita - dijo Simon de manera tierna.

Yo sólo reí y Simon dio un tierno beso a mi barriga, sin duda será un padre excelente. Yo sé que él es el padre, mi sexto sentido me lo dice, Simon es el padre de mi pequeño peanut.

Después Simon subió a mis pechos, los tomó con ambas manos, los masajeó e hizo una rostro de rareza.

-¿Qué pasa? - le pregunté.

-¿Están más grandes? - preguntó con una sonrisa en los labios.

-Sí, durante el embarazo suelen crecer mi amor.

-¡Bendito embarazo!- gritó Simon y comenzó a reír- siempre me han gustado tus pechos, vaya, son prefectos, pero están rebasando el límite de perfección amor.

Simon me quitó el sostén y quedaron al descubierto mis senos , él los veía con fascinación, pasó la lengua por sus labios mientras su vista seguía viéndome en exhibición. Seguido de la mirada con lujuria con la que Simon me veía tomó de nuevo mis senos con ambas manos y uno de ellos lo llevó de inmediato a su boca, pasando su lengua por el pezón y después sus dientes tirando del mismo. En ese momento mi respiración de tranquila se tornó a intranquila, se agitó de inmediato, eché la cabeza hacia atrás por las sensaciones que explotaban en mi interior y también en mi exterior. Simon tiene el poder de hacerme sentir mil cosas con poco.
Simon dejó el juego con mis senos y ahora se bajó hasta llegar a mis pies para quitar los tacos y después liberar mi cuerpo de la cintura hacia abajo para quitarme la falda y las bragas y él después de eso no pensó más y se quitó todo lo que estorbaba en su cuerpo hasta quedar ambos completamente desnudos. Su erección se apreciaba de tal manera que me mordí los labios y él sonrió.