Es como una venganza

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Las palabras de Simon fueron excitantes para mí. No volvimos a tomar asiento, sino que nos fuimos directamente al hotel. Esta vez no hubo necesidad de que el chico botones nos acompañara, ya no traíamos equipaje y sabíamos donde quedaba nuestra habitación. Subimos al elevador y Simon me acorraló contra la pared.

-Esta noche te haré enloquecer- dijo muy cerca de mi rostro y yo abrí mucho los ojos.

Y en el momento en el que dio fin a su advertencia, me beso, un beso que no era tierno, eso era un beso demasiado pasional, con fuego, nuestras lenguas se unieron sin querer Separarse. Simon aún besándome metió una mano debajo del vestido y la llevó hasta mi zona íntima, masajeándola por encima de la ropa interior de encaje que llevaba puesta.

-Ahhh- me separé y solté un gemido.

-¿Te gusta?- dijo dándome besos en el cuello y siguió en lo suyo.

-Ahh sí- dije recargando la cabeza en una de las paredes del elevador.

Nos interrumpió el elevador, pues ya habíamos llegado a nuestro piso. Simon me tomó de la mano y llegamos a la habitación, el trayecto a la habitación se me hizo en demasía largo, me urgía comenzar esta noche de pasión que me esperaba, tenía tanto tiempo sin sentir a Simon en mí después de la pelea por las fotos y mi menstruación.
Simon abrió la puerta y me jaló al interior de la recámara, me tomó de la cintura, me pegó a su cuerpo y sentí su miembro rozar mi vientre, eso me excitó aún más de lo que ya estaba.
Me besó y dando pequeños pasos me llevó hasta la cama en la que aún estaban los pétalos de rosas, pero que al acostarnos se perdió la forma de ellos.
Simon , una vez que yo me hallaba acostada sobre esa cama, se fue directamente a mis pies, quitó los tacoas y dio un pequeño masaje a ellos cuando se despojó de ellos. En seguida subió y bajó el cierre del vestido que estaba a un costado, ayudándome después a quitarlo y dejándome sólo en la ropa interior que traía puesta. Supuse que él ahora se subiría encima de mí y comenzaría a besarme y a comenzar el juego de pasión que siempre daba inicio, pero no fue así, se levantó de la cama.

-Espera aquí, no te muevas- dijo.

Y yo obedecí, fue a una de las mesas que había en la suite y a su regreso en las manos traía lo que creo era un antifaz.

-¿Qué es eso?- pregunté en seguida.

-Es un antifaz, porque hoy, te voy a enseñar a que disfrutes del sexo con sólo sentirlo.

Puse los ojos como plato y dejé que le pusiera el antifaz. Él lo puso con mucha delizadeza, no veía nada, estaba nerviosa de no saber qué es lo que haría, no podía improvisar porque yo no veía nada, todo estaba oscuro en mí.
De pronto sentí a Simon encima de mí, me besó la oreja y mordió el lóbulo de la misma, haciéndome sentir escalofríos al contacto, enseguida me besó la mejilla, la comisura de los labios y al final un apasionado beso en los labios al que cedí sin preocupación. El no ver y sólo sentir me estaba gustando. Después de terminar el beso, Simon inició un viaje con la lengua, iniciando con mi barbilla, después por el cuello hasta llegar a mi pecho, la sensación de su lengua húmeda sobre mi cuerpo era tan excitante, yo, ya estaba húmeda por completo, me estaba exasperando tanto juego y no sentirlo encima de mí. Lo tomé de la cabeza y él en un rápido movimiento las quitó y las acorraló con sus manos en la cama, negándome hacer cualquier movimiento.

-Hoy no vas a tocar- dijo en un susurro sobre mi oreja- tú cuando me bailaste no me dejastate tocar, es como una venganza, pero mejor- dijo volviendo a morder el lóbulo de mi oreja.

-Ahh- solté un gemido cuando él me mordió

-¿Dónde me quedé? - preguntó- ¡Ah sí! Ya lo recordé

Se volvió a posicionar sobre mis senos, reanudando el viaje que había emprendido con si lengua, de mid senos bajó hacia mi abdomen y se detuvo en el ombligo, pero en un instante ya no lo sentí, me recargué sobre mis codos a punto de quitarme el antifaz, cuando él regresó y me volvió a acostar sobre la cama. De pronto sentí un líquido entrar en mi ombligo y después la lengua y boca de Simon succionando lo que había ahí dentro.

-¡Qué bien sabe el vino! - expresó Simon- abre la boca- me ordenó y yo hice caso, pero, antes me ayudó a levantar un poco la cabeza para darme un poco de vino- no lo tragues.

Le hice caso y no lo tragué y de pronto sentí como su boca se apoderaba de la mía y él se tomaba de mi boca el vino que me había dado, la sensación era excitante, mi respiración era muy agitada.

-¡Delicioso!- al decirlo mordió mi labio inferior y yo eché la cabeza hacia atrás por lo que esto me había provocado.

Ahora se había dejado de juegos con la lengua y con la boca y procedió a quitarme el sostén, no sé cómo hizo para quitarlo. Después bajó a mi zona "v" para quitarme la braga, no sin antes masajearla.

-¡Vaya que estás húmeda! - dijo mientras se despojaba de la braga.

Pasó un dedo desde el ombligo hasta el famoso mone de venus. Lo tomé de la mano e hice que introdujera un dedo dentro de mi zona privada, pero él al instante lo retiró. Sentía cómo una oleada de decepción se apoderaba de mi cuerpo.

-No se desespere mi niña. Esto será lento. No sabes cómo estoy disfrutando de ver tus expresiones al sentir el placer en todo su esplendor. Podría pasar la vida entera así como estamos ahora.

Hasta aquí el capítulo de hoy niñas, disculpen no se los haya publicado antes, pero, resulta que el día de ayer estuve todo el día chidmeando con unas amigas daydreamers y me comió el tiempo 😂 espero lo disfruten y esta noche no se van a escapar de la pasión de SIDELE. Voten mucho y comenten mucho. Espero les fascine y como siempre me despido.

¡Gracias infinitas! 💚

Simon, I miss you (Terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora