Simon, I miss you (Terminada)

Simon regresó

-Simon - dije abriendo mucho los ojos- ¿Qué, qué haces aquí? - pregunté tomando mis cosas.

-Vine a trabajar- respondió a secas y me dio la mano para ayudarme a levantar.

-¿Aquí? ¿Cuándo? ¿Con qué grupo? - pregunté nerviosa, estar cerca de él de nuevo me ponía muy nerviosa.

-Sí, aquí, hoy, con tu grupo. - respondió y finalmente me levantó.

-Mi grupo- le dije abriendo los ojos- ya voy tarde, gracias. Te, te veo más tarde. - le agarré el hombro.

-No lo creo, tú y yo lo más lejos posible Adele.

Sentí una punzada de decepción cuando dijo eso, mi corazón se había roto una vez más, una jodida vez más.

-Buenos días chicos - entré al salón de clases.

-Buenos días maestra. - dijeron todos.

Di la clase como cualquier otro día , pero definitivamente no andaba de humor tras lo que sucedió con Simon. Justo al término de la clase llegó Peter al salón y su apariencia no me gustó para nada.

-Adele- dijo frío.

-¿Mande? - pregunté guardando mis cosas.

-¿Ya supiste? - preguntó.

-No ¿Qué cosa?

-Que Simon regresó- me tomó del brazo y me volteó para quedar frente a frente. 

-Sí, sí lo sabía- le dije cerrando los ojos.

-Lo sabía, por él es que estabas llorando ayer ¿Verdad?

-No- dije agachando la cabeza.

-MALDITA SEA ADELE , JÚRALO QUE NO ERA POR ÉL - gritó.

-Sí , sí era por él - le dije llorando.

-¡Mierda!

-Pero, no Peter, no te preocupes , entre Simon y yo no pasa nada, él , él sólo quería saber qué había pasado conmigo.

-No fue precisamente lo que él me dijo señora Adkins.

-¿Qué te dijo? - pregunté con cierto temor.

-Dijo que él había regresado por ti.- se me quedó viendo fulminante.

-Yo estoy casada contigo Peter, yo no te faltaré, tú eres mi marido ahora.

-Pero, no sé , no me gusta que esté de regreso, tengo miedo pequeña, tengo miedo- dijo tomándome el rostro con ambas manos y dándome pequeños besos en los labios, uno tras otro.

-No tengas miedo Peter, yo, yo estoy ahora contigo y eso es lo que importa, tú eres mi marido y mi vida es a tu lado- Peter se tranquilizó y me abrazó.

Me sentía mal al decirle esto, yo quería salir corriendo a los brazos de Simon y decirle cuánto le amo y las ganas que tengo de besarlo, de sentir su cuerpo unido al mío , creando esa pieza perfecta, nuestros cuerpos fueron hechos para estar juntos.

-Te amo pequeña y sin ti mi vida no sería nada. Tú eres mi vida.

-Te adoro Peter.

Salió del aula directo a su clase y yo salí de igual forma del aula directo al consultorio.

-Hola Gali ¿Algún paciente que ya haya llegado?

-No, pero sí tiene tres citas agendadas el día de hoy.

-Bien, conforme vayan llegando los mandas directamente a mi oficina ¿Sí?

-De acuerdo doctora- hizo una pausa- disculpe