Capítulo 10: Descontrol

1.9K 212 2
                                    

Reprimo las ganas de golpear a Alex al verlo caminar de un lado a otro desesperado. Me había ordenado que me sentara y tranquilizara.

¿Pero cómo quiere que me tranquilice si hace casi diez minutos que espero una explicación?

Pero él no había dicho nada aún, al menos no a mí, de vez en cuando soltaba una que otra palabra o frase sin coherencia, y eso sólo me molestaba más.

Un par de minutos después, al fin para de caminar, pero sólo por unos segundos para después agitar sus brazos estresado. Casi doy un salto de alegría cuando por fin habla.

―Te enfadarás demasiado...No...―cierra la boca y medita sus palabras―. ¡Serás más bien como una bomba atómica!―exclama―. Literalmente tú estarás hecha una furia, y tu incomprensible odio hacia ella sólo lo empeorará, tú querrás asesinarla...Y yo también porque ambos compartimos los sentimientos...―sus ojos se abren como platos―. ¡Seremos una bomba atómica!―grita.

Entorno los ojos irritada y agacho la cabeza mientras escucho su estúpido parloteo. Durante los siguientes cinco minutos se dedica a hablar sobre lo mucho que me enojaré en cuanto me diga.

¡Pero yo sólo quiero que lo suelte de una buena vez!

―Sólo quiero decirte que yo no tenía idea hasta anoche...―se coloca frente a mí y clava la mirada en una roca. Yo reprimo un gruñido―. Bueno de la primera cosa que tengo que decirte si estaba enterado pero no quise decírtelo porque estábamos en medio de una guerra y que tú odiaras a Adelí en ese entonces sólo nos traería otro problema―me mira desesperado.

Elevo la mirada, ansiosa de que al fin me diga lo que he esperado todo este jodido tiempo, pero hago una mueca cuando vuelve a hablar.

―Pero eso no importa ya porque ahora la odias tal vez el triple de lo que la odiabas antes...pero aún así te lo diré porque prometí que no te guardaría secretos.

Cruzo mis piernas y carraspeo, colocando mis manos juntas sobre mis rodillas, entonces lo miro atenta a que prosiga.

―Sólo quiero asegurarme de que no te irás hasta que termine de contarte todo―demanda, frunzo el ceño desconcertada.

¿Tan grave es?

―Promételo―me mira fijamente―. Sarah promételo.

Suelto un bufido.

―De acuerdo, lo prometo―pongo los ojos en blanco.

―Bien―chasquea la lengua―. Sobre lo que te tengo que decir, ¿Quieres oír primero lo malo, o lo más malo?

―Da igual―digo entre dientes, la espera comienza a exasperarme.

―De acuerdo―suspira―. ¿Recuerdas cuando las secuestraron a ti y a Monique, antes de que ella bueno...muriera?...Bueno, se suponía que el plan era secuestrar sólo a Monique para que ella abriera la cueva y después la matarían...―elevo la mirada y ahora lo miro con curiosidad―. Un plan que Adelí elaboró―contengo el impulso de levantarme, intentando mantener mi promesa con Alex―. Fue engañada y te secuestraron a ti también, después nos ayudó a ir a rescatarlas pero cuando tuvo la oportunidad...no lo hizo, ella dijo que la habían atrapado pero yo jamás le creí.

De un momento a otro me encuentro de pie a centímetros de él.

Quiero gritar. Reclamarle por no haberme dicho hasta ahora, pero había prometido estar en silencio y ya había sido suficiente con romper la de estar sentada. No sabía exactamente cuál era la expresión en mi rostro pero por dentro estaba furiosa, y a juzgar por la mirada de alerta de Alex sabía que se notaba.

Demons| TC2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora