¡Ups! Una vida menos

Capítulo 10

— La primera prueba es un recorrido con unos obstáculos. El recorrido contiene pruebas de correr, nadar, arrastrarse, saltar, trepar, colgarse y mantener el equilibrio. Todo le es permitido ya que la vida no es justa y hoy tampoco lo será. Son 14 participantes, los primeros 11 pasan a la siguiente prueba. Nos vemos en las siguientes pruebas.

— Por favor, pónganse en la línea. —continuó Norton. Miré una última vez a Alan y éste estaba muy serio. Nos alineamos— Preparados, listos. —suena el disparo y salimos todos corriendo.

El primer obstáculo eran unas escaleras colgando, cuatro para ser exactos. Logré llegar a una y subí lo más rápido que pude. A la mitad, el de abajo de agarró del pié. Sacudí mi pié para que me dejara pero agarró más fuerte. De inmediato le di un golpe con el otro pié haciéndole caer. Miré a las otras escaleras y estaban más adelantados. Al bajar por el otro lado, le di una fuerte patada en la barriga a alguien que estaba al otro lado, finalmente cayendo al suelo. Más abajo habían dos chicas, ellas ya iban atrasadas así que las deje y baje. Ellas tampoco me hicieron algo. Mejor para ellas. Por el momento iba la tercera.

Pasé a la siguiente prueba. Eran tres vallas y después dos muros, los cuales teníamos que escalar. Las vallas las pasé fácil y escale el muro lo más rápido posible. Al llegar arriba me la jugué y salté directamente. La distancia no era tan grande por lo que tuve una buena caída. Ahora iba segunda.

En la siguiente prueba teníamos que andar sobre una barra muy fina. Hice unos pasos pero fui empujada por Rowen, el nuevo.

— Hijo de. —me callé.

Volví atrás, comenzando de nuevo. Quería empujarle pero estaba lejos. Sin más molestias conseguí pasar. Me atrase bastante con esto.

En la cuarta prueba, había una gran piscina llena de barro en la que sobresalía unos troncos. Miré fijamente los troncos, tomé carrerilla y las pase de un tiro. Estoy orgullosa de lo que acabo de hacer. Me puse en primer lugar.

La quinta y última prueba, teníamos que arrastrarnos por debajo de unos alambres con púas, estaba demasiado bajo. Me arrastre lo más rápido que puse pero, llegando al final, me enganché. Mierda, mierda, mierda. Intenté zafarme pero creo que lo empeore. El primero paso, el segundo también y así pasaban por delante mía. Podía oír la voz de los chicos animándome pero me era imposible. Una idea se me cruzó por la mente. Desabroche la chaqueta, quedando en sostén. Seguí arrastrándome y lo logré. Me tiré al suelo al pasar la meta.

— Bien hecho. —pone alguien la mano en mi espalda

— ¿Estoy dentro?

— Sí. —era Marcus.

— Joder.

— Menos mal que se te paso eso por la cabeza. —respire hondo y no dije nada más hasta que Louis y Norton hablaron.

— ¡Chicos venid aquí! —gritó Louis.

Norton nos dijo los que pasaron a la siguiente prueba, quede sexta.

— Toma. —me extiende Patrick mi chaqueta. Le sonreí.

— La siguiente prueba es de puntería. Tendrán que disparar con un rifle, escopeta, pistola y arco. Sólo tienen un disparo con cada una. La diana va de diez a cinco puntos. Los primeros ocho que logren mayor puntuación pasarán a la siguiente prueba. —nos explican.

Ésta prueba fue muy fácil para mí. Estuve entrenando con Marcus toda la semana. Obtuve cuarenta puntos. Haber quien me supera. Nadie porque es lo máximo. Reí dentro de mi por la estupidez que acababa de decir. Marcus y Rowen también obtuvieron cuarenta puntos. Cuándo le tocó a Patrick, Rowen gritó haciendo qué sobresaltemos. Aún así Patrick logró treinta y siete puntos. Cuándo acabaron todos, nos dijeron quien pasaba a la siguiente prueba, aunque estaba mas que claro. Éramos cuatro chicas y cuatro chicos.

— Vengan por aquí. —nos señalo Louis hacia la explanada. Estoy intrigada de saber que prueba sigue— La siguiente y última prueba, como ya sabéis, es la más difícil. ¿Estáis listos? —gritó eso último.

— ¡Sí! —gritamos nosotros.

— Hemos aprovechado que han cambiando las normas del juego por lo tanto la prueba consistirá en pelear hasta la muerte.

De inmediato miré a Alan. Por esto estaba así. Éste me miro preocupado con las manos en la cabeza.

— Si quieren rendirse, están en todo su derecho. ¿Alguno quiere abandonar la prueba? —hace una pausa. Miré a los otros. Estaba Marcus, Patrick, Rowen y otro chico. No quisiera pelear con ninguno de ellos— Si nadie quiere seguimos con la prueba. Son ocho así que van a ganar sólo cuatro. Para que no digan que hubo sabotaje en las elecciones, os dejaremos que saquen un papel.

La primera fue una chica, le tocó con Marcus. La siguiente fue otra chica que le tocó con otra. Por lo tanto quedaba tres chicos y yo. La suerte no esta conmigo hoy. Si tengo que matar a alguno de ellos lo haré. El siguiente en sacar fue Patrick. Al sacar el papel me miró con temor. Le entregó el papel a Norton.

— Ya tenemos las parejas. Patrick irá con —parecía que hablaba a cámara lenta— Billy por lo tanto Rowen irá con Madison. —No es posible. La suerte definitivamente no esta conmigo hoy. Miré a Rowen y éste tenía una sonrisa entre maliciosa y victoriosa. Me giré para mirar a Alan. Él estaba perplejo— Lo que me queda por decir es: ¡qué descansen en paz! —gritó dando por comenzada la prueba.

Me volteé rápidamente. Rowen estaba con los músculos tensos. ¿Cómo voy a matar a ésta bestia? Si él con una hostia me pega al suelo.

— Venga, las señoras primero. —me dice.

— Señorita. —le corregí.

Corrí hacia él dándole un puño en el estómago que no causo gran cosa en él. Quiso darme un puño pero lo esquive. Vi por detrás a Marcus ahorcando a la chica. Volví a centrarme en la bestia. Me acerqué a él para acortar un poco la distancia. Le di unos golpes en los muslos para que se fuera debilitando. Después le di un puño rápidamente en la barriga seguido de otro en la cara. Uf eso no le gustó. Había conseguido que se enojara. Me devolvió el puño haciéndome retroceder unos pasos. Moví mi cabeza de un lado hacia el otro haciéndolo crujir. Ésta vez él se acerco para acortar la distancia. Intenté darle una patada en la cabeza pero la esquivó y al esquivarlo logró darme un puño en las costillas. Un gritó nos hizo mirar hacia la derecha. La chica le acababa de romper el brazo a la otra. Aprovechando su distracción, me tiré encima de él, derivandole. Comencé a darle un puño tras otro aprovechando la situación pero poco después él me tomo por el cuello tirándome al lado. Los dos nos pusimos de pié. A continuación hubo una serie de patadas y puños por parte de ambos y aún seguíamos de pié. Mi nariz ya estaba sangrando y a él le sangraba el arco ciliar. ¿Qué más puedo hacer si ya no puedo más? Miré a los lados y los chicos ya habían acabado. Estaban mirando nuestra pelea.

— ¡Marcus! —le grité.

— ¿Qué?

— No hay reglas. —me preparé para el siguiente ataque.

— ¿Cómo? —dijo confundido. Al parecer no entendió.

De nuevo acortamos la distancia. Éste iba a ser el último golpe, lo sentía. Después de dar un giro para que el golpe sea más fuerte, le planté mi pié en toda su cara pero al mismo tiempo él logró darme un puño. Un puño muy fuerte, haciéndome caer al suelo y quedar inconsciente.