36. Estoy Enamorada De Ti (Maratón 1/2)

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Mientras más pensaba en la opinión de los demás más limitada se encontraba. Al comenzar a pensar en ella era más libre.

El silencio había durado unos segundos pero Ally podía jurar que en cambio habían sido horas. Y no quería más de eso, si había arruinado algo quería saber y si tenía oportunidad también necesitaba saberlo.

—De verdad no estoy mintiéndote. No quiero que te sientas obligada a...responder o a aceptar—dijo Ally bajando un poco la mirada. Las ansias ya habían comenzado a invadirla—. Solo quiero tu más sincera respuesta.

Normani la miró con una ternura inmensa. Estaba viendo a la persona, la chica que tantas cosas le provocaba y sobre todo que más cariño, confianza y ahora lo sabia también, más amor le inspiraba. Se acercó y buscó levantar su rostro tomándola por la barbilla, para que pudieran verse directamente a los ojos.

Había tardado mucho pensando las cosas no porque no quisiera responder y estuviera evitándola. La verdad era todo lo contrario, por supuesto que estaba tan interesada qué diría que sí pero no podía evitar pensar en su padre. Cuando se enterara...

Negó con la cabeza y buscó apartar todos esos pensamientos que lo incluían y que solo estaban abrumándola, no podía seguir haciendo las cosas porque alguien más quería que así fuera, tenía que comenzar a hacerlo porque era lo que ella en realidad quería. Mientras más pensaba en la opinión de los demás, más limitada se encontraba. Al comenzar a pensar en ella era más libre.

Pero tenía que ser valiente, observó a Ally que estaba mirándola con esos ojos cafés llenos de preocupación y Normani enseguida pensó que ella lo había sido arriesgándose a todo lo que había hecho por ella el día de hoy incluso con el miedo que la misma Normani dijera que no. Pero aún así había intentado todo y a ella le había encantado cada instante del día que habían pasado.

—No me siento obligada en nada. Quiero ser algo más para ti Ally, me alegra que me hayas quitado de esa categoría de solo amigas—rió un poco y luego se acercó rodeando a Ally por su cintura con uno de sus brazos—. Quiero que tú seas todo eso para mí, yo debería ser la que te lo pregunte ya que insistía tanto en besarte y quería hacerlo pero no habría tenido una idea tan brillante como tú. Pero como tú lo has hecho primero, solo te responderé que sí. Que me encantaría algo serio contigo.

—Tenía preparado todo un discurso para ti, pero lo he olvidado por estar nerviosa—admitió Ally con las mejillas ruborizadas provocando que Normani riera un poco y juntara su frente con la suya—. Aún puedo decirlo si quieres escucharlo.

—Me encantaría poder escucharlo pero...—Ally sonrió en cuanto Normani besó tiernamente su nariz—. Creo que podríamos hacer algo mejor en este momento.

—Bueno ahora sí puedes besarme si eso es a lo que te refieres—bromeó pegando su frente con la de Normani, rozando sus narices y mirándose profundamente a los ojos—. Solo para informarte.

—Esas sí que son buenas noticias, porque ya no podría evitarlo más.

—Ya no tienes que evitarlo—respondió Ally dulcemente.

En cuanto Ally sintió los labios de la chica morena rozar los suyos le fue inevitable sonreír por lo emocionada que estaba, era un sentimiento tan puro que había ido creciendo conforme la iba a conociendo más que no se había dado cuenta que no se detenía; y dudaba que algún día lo hiciera. En ese momento estaba enamorada y lo que seguía después no le importaba, estaba en el ahora e iba a disfrutarlo tanto como se le permitiera.

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