Lo admito, ella tenía algo diferente, distinto. Jamás había sentido algo tan raro en mi vida, esa necesidad de conocer a esa persona y pasar escuchándola todo el día de ser necesario.
-pero qué tonterías estoy pensando -susurré
Ella es hermosa, de seguro tiene en su estuche miles y miles de cosméticos, artefactos de belleza y otras ideas en su mente.
En la escuela como un cliché, puedes encontrar muchas formas de pensar, diferentes actitudes y diferentes personas. Aun que suene un poco presuntuoso, nunca fui algo definido tal ves por mi circulo social, dicen que si te juntas con lobos aprendes a aullar, pero yo me juntaba con lobos, ratones, osos, prácticamente con medio bosque.
Y lo mas gracioso es que nunca había encontrado a alguien como ella. Era raro en mi, comportarme como si ya la hubiera conocido de antes.
Aquella mañana en la escuela me la pase pensando en ¿cómo la podría encontrar? Estaba completamente seguro de qué asistía a mi escuela.
Estuvo en el desfile, pero jamas la había visto por la escuela antes.Sonó la campana y salió todo mi salón, bueno admito que no había muchas actividades por hacer, después de todo, estábamos en medio de un bosque.
En seguida todos mis amigos habían desaparecido cuando yo baje, eso no me sorprendió, tenia hambre y estaba la cafetería abierta.
Me sorprendió lo que vi al llegar.
Era ella.
Estaba sola, con sus audífonos puestos. Quise acercarme lo juró, pero que podía decir; "hola, ¿te acuerdas de mi?
No lo se tal ves necesite de ella antes, me senté un momento en el suelo y la vi, la mujer mas hermosa que había visto mis ojos, no eran sus curvas, ni menos su cabello. Era la forma en como bailaba con los audífonos puestos, aquella manera de perderse en sus sueños.
No. Ella era diferente, no era cómo ellos ni como yo, ¿acaso alguien así puede existir?
Ella se encontraba bailando junto a un árbol dentro de la escuela, exactamente el único árbol que tenia la parte superior de la escuela.
Recuerdo que antes de conocerla me había sentado ahí, exactamente a escuchar música, pero deje de hacerlo cuando pensaron que estaba loco.
Me encantaba la forma en que se perdía en su propio mundo, no necesitaba de nada, unos simples audífonos y el silencio del mundo.
-¡oye Mario! Hasta que te encuentro, vamos tenemos que irnos —grito Eder
Ella lo había escuchado y giro su mirada a mi, tomo su mochila y bajo hacia la salida.
-¿qué acaso me estas ignorando?— dijo Eder acercándose a mí
-te escuche a la primera —dije un poco enojado
-Donde te has metido.
-me perdí (en ella)
Dije, mientras levante mi mano para ayudarme a levantar.
-ya lo imaginó —dijo Eder con un tono sarcástico —realmente no se por qué te sigo invitando a los juegos, bueno la verdad es que tienes dos pies izquierdos y no eres tan bueno en los pases oh bueno, al menos ayudaras para a completar el equipó.
Yo totalmente perdido en ella ignoraba las palabras de Eder
- vamos, sube ya a la bici, tenemos que llegar antes que el equipo contrario, quiero conocer a sus amigas, antes de que lleguen sus novios —dijo Eder dejando ver el brillo en su iris.
-no otra vez, la ultima vez que te ayude a conocer a tus "amigas" tuve que explicarle a sus novios que hacíamos con ellas, ¿no puedes buscar alguien soltera? Ya sabes algo estable.
-vamos, somos jóvenes aun, tengo toda una vida por delante eso de juntarme simplemente no va conmigo, además ellas no se ven enfadadas ante mis encantos, ¿esta bien?.
-supongo
Durante el resto del camino Eder me siguió contando de sus amoríos, pero yo deje de prestarle atención, 10% por que no era de mi interés y 90% por ella.
No sabía su nombre pero aun así no podía sacarla de mi cabeza, era distinta, diferente, entre más quería descifrarla más me confundía, no había precedentes antes de alguien como ella.