Capítulo 23

4.3K 336 99
                                    



Había aprovechado la buena tarde para ir con las niñas un rato al parque. Hacía tiempo que no disfrutaba de una tarde entera así con ellas, solamente viéndolas disfrutar moviéndose de un lado para otro mientras ella tan sólo las observaba, algo que le otorgaba un ratito de paz y tranquilidad, dos cosas que su cabeza necesitaba después de los últimos acontecimientos, donde claramente destacaban dos; por un lado el susto que su abuelo les había dado, y por otro aquel abrazo de Lexa. El mismo que había necesitado sin tan siquiera ser consciente de ello. El mismo que le pilló totalmente por sorpresa, y el mismo que involuntariamente su cuerpo decidió devolverle por voluntad propia. Así, a la ligera. Sin consultar.

-¿Estás aquí o en Marte? –Llamó su atención Abby, ya que al parecer se había quedado más tiempo de lo normal perdida en sus propios pensamientos.

-Creo que Eliza es hiperactiva o algo así –le contestó a su madre, con quien compartía una bolsa de pipas mientras observaban a las pequeñas desde un banco. Concretamente a la aludida, quien no dejaba de tirarse por el tobogán una y otra vez sin descanso.

-Tú eras igual Clarke –confesó su madre mientras ella la mirada frunciendo un poco el ceño ante aquella confesión tan espontánea.

-Mentira –soltó con rapidez –esa niña es puro demonio.

-Cariño. Recuérdame cómo te dice el abuelo.... –su madre sonrió mientras ella ponía una mueca con la cara.

-No mientas, hasta el abuelo dice que Eliza es peor –intentó defenderse con cualquier excusa barata que pudiera sacarle de la escena.

-Tú sí que mientes –rió su madre mientras ambas sonreían al ver como las pequeñas saltaban sobre una colchoneta.

-Por cierto ¿cómo sigue el abuelo? –Preguntó bastante interesada.

Lo último que había sabido de él es que había vuelto a su casa, aquella que estaba junto a la playa y que a ella tanto le encantaba. Información que conocía de primera mano, ya que el día anterior le había llamado por teléfono para asegurarse de que todo iba bien.

-Lo llamé esta mañana, dice que está bien –contestó su madre –y también dice que no seamos tan pesadas, que le vamos a fundir el teléfono a este ritmo.

-Es un cabezota –dijo negando con la cabeza –podría venirse a vivir aquí.

-Ya sabes lo unido que esta a aquel lugar –detalló su madre a pesar de que era una información que ella conocía muy bien.

Y es que tras la muerte de su abuela, tanto Abby como ella habían insistido en que se marchase a vivir con su madre o a un sitio más cercano. Propuestas que fueron rechazadas una y otra vez sin entrar en razón.

-Es increíble ¿Cierto? –Preguntó a su madre al ver como la pequeña Alycia pasaba de la colchoneta y se dirigía a un pequeño jardín con flores. –¿Cada vez se parece más a ella o es mi imaginación?

-Y Eliza cada vez se parece más a ti también –contestó su madre sonriente y dándole la razón.

-A veces parece que la tengo delante. Es capaz de hablarme con la mirada como lo hace Lexa. Y joder, es sólo una niña –dijo tras soltar un leve suspiro.

-Son un buen reflejo vuestro –confesó su madre observando como Eliza corría hacia su hermana para intentar chincharle un rato. –Aunque las dos tienen su peligro...Alycia es más tranquila y se entretiene con cualquier cosita. En cambio Eliza.... –Sonrió antes de describir a la más pequeña.

-Todos sabemos como es Eliza –dijo ella sabiendo perfectamente la concepción que tenían de la pequeña. Una renacuaja que era puro nervio, que no paraba quieta y que siempre necesita acción para entretenerse.

Arkadia 2 (AU) -Español [Clexa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora