Arkadia 2 (AU) -Español [Clexa]

Capítulo 55

Fue extraño. Muy extraño. Y es que nunca se hubiese imaginado que su torpeza en las escaleras acabase de esa forma tan extraordinaria y magnifica. Porque en cuanto Clarke pronunció "te voy a llevar a casa" su corazón dio un salto tremendo, hasta había temido de que llegara incluso a salir de su pecho para chocar contra el cristal del coche. ¿Qué posibilidades había que su siguiente parada tras el hospital fuese su casa? ¿Su casa de verdad? Esa casa que tantos recuerdos y momentos había compartido con Clarke y las niñas.

Todo parecía estar haciéndose una gran bola de sensaciones que conseguía arrasar poco a poco todo su interior. Porque nadie podía negarle que durante el rato en el hospital una serie de acontecimientos bastante importantes comenzaron a trastocar parte de su mente al intentar analizar y unir todos bajo un mismo nombre. Y es que si unía la mirada de preocupación de Clarke en cuanto la vio sentada a su lado en la sala de urgencias, el intento de defenderla delante del médico, e incluso la sensación de celos que sintió en cuanto su compañero Tyler entró en escena, todo parecía unirse bajo un mismo nombre y apellidos; a Clarke seguía importándole.

Y seguía importándole bastante. Porque no era un simple "te echo de menos" de extrañar la convivencia entre ambas y ciertos aspectos del día a día. Porque aquello reflejaba claramente que Clarke seguía preocupándose por ella y que sus sentimientos, aun algo enterrados en alguna parte de su ser, habían salido a flote sin ningún tipo de salvavidas, dejándola completamente expuesta ante la realidad.

-Toda la tropa –susurró Clarke quedando sólo unos metros para llegar a la puerta de casa, observando cómo esperaban en la puerta Abby, Lincoln y Murphy, quienes entretenían a las niñas y al pequeño Ricky. –Y detrás también –le informó, fijándose por el espejo retrovisor como el coche de Raven las seguía de cerca. –Espera aquí un momento, voy a abrirte –fue lo último que dijo Clarke antes de parar el motor del coche y salir, dejándole unos minutos a solas donde el intento por tranquilizarse un poco fue totalmente nulo.

Se quedó observando cómo las pequeñas rápidamente corrieron hacia Clarke, y también cómo Abby y el resto miraban algo sorprendidos hacia ella. Normal. Muy normal. Aun ella estaba asimilando el cómo y el por qué Clarke había decido eso. Pero de algo estaba segura, y es que no se iba a quejar en absoluto. Nada de nada. Su peripecia en las escaleras había logrado algo que ella estaba deseando desde hace bastante tiempo. Todo envuelto en un juego sucio absoluto ya que su vuelta a casa encajaba directamente con el leve detalle de su lesión.

-Va fortachón, haz que tus músculos sirvan para algo –le dijo Clarke a Lincoln tras abrir su puerta.

-Sólo deja que me apoye un poco –le pidió ella a Lincoln cuando su amigo se acercó hasta ella.

-Es más rápido a mi manera –contestó él cogiéndola directamente en brazos.

-Adentro –escuchó la voz de Clarke, observando cómo adelantaba a Lincoln por un lado para abrir la puerta y dejarles paso a ellos primero. –Arriba –le pidió en el rellano de la entrada, señalando la segunda planta. –La última que cierre –le escuchó decir mientras Lincoln subía con ella a cuestas las escaleras.

-Gracias –le susurró antes de entrar en la habitación.

-No hay de que –contestó su amigo sonriente mientras la dejaba con cuidado sobre la cama, sintiendo como las niñas se subían con rapidez también, moviéndose hasta ella y fijándose también como la habitación se llenaba poco a poco de todos, sin tan siquiera darle unos minutos para ir asimilando la situación.

-Estoy bien –fue lo primero que dijo mientras las pequeñas se sentaban a su lado –no hay rotura ni nada, solo es una leve lesión que curara con reposo –aclaró ante la atenta mirada de todos, fijándose en cómo Abby salía un momento fuera, donde posiblemente estaría también Clarke, la única que no había entrado a la habitación todavía.