Arkadia 2 (AU) -Español [Clexa]

Capítulo 39

Esa mañana se había despertado sintiéndose realmente agotada, porque el hecho de no pasar tiempo con las niñas cada vez le pasaba más y más. Y no era un agotamiento sólo físico, también lo era mental. Y es que la fuerza para seguir con esa situación parecía estar desapareciendo por momentos. Y su cabeza cada día que pasaba parecía estar convirtiéndose en una autentica bomba de relojería, donde el hecho de estar en casa y ver todas las cosas de las niñas no ayudaba nada de nada. Era como si la propia casa se le viniese encima de golpe. Así que decidió salir de allí en cuanto antes, dirigiéndose a la galería, con la idea también de poder adelantar algo de trabajo en la exposición con la que estaba ayudando a Oliver, porque la verdad es que lo tenía todo un poco abandonado ya que su mente parecía no querer concentrarse más de dos minutos. Además, tampoco tenía muchas más opciones, Oliver nuevamente había salido de viaje, así que le tocaba pasar el día por completo allí, era lo que tenía el ser socia ¿en qué momento se le ocurrió aceptar? Menuda blanda estaba hecha.

Decidió acomodarse en una de las salas que utilizaban para hacer algún tipo de reunión, la solía utilizar de despacho las veces que no bajaba al sótano. Porque aunque Oliver le había ofrecido en numerosas ocasiones tener un lugar propio allí, ella siempre se negaba, tenía más que suficiente con su rinconcito en el sótano. No necesitaba más.

-Clarke –llamó su atención la joven recepcionista de la galería. Incluso provocando un pequeño respingo en ella, ya que al parecer su concentración había decidido volver aunque solo fuese momentáneamente.

Levantó la vista, apartándola un momento del portátil, esperando alguna palabra más de Anna. Pero no llegaron más palabras, solo una interrupción en forma corpórea que le sorprendió bastante.

-Hola guapa –dijo Dana entrando de golpe a la sala. La joven modelo algo descarada y directa que había conocido hace semanas en la campaña publicitaria de ropa interior.

-Lo siento, no he podido pararla –se disculpó la recepcionista con sinceridad.

-No te preocupes –dijo con una ligera sonrisa, observando cómo Dana se sentaba cerca de ella, justo en el filo de la mesa –yo me encargo –le aseguró antes de que la joven se marchase, dejándolas a solas.

-Clarke Griffin –observó la gran sonrisa de Dana mientras la examinaba por completo con una intensa mirada –no sabes que placer me da volver a verte.

-¿Cómo me has encontrado? ¿Y qué haces aquí? –Le preguntó sin andarse con rodeos.

-Bueno...una tiene sus contactos –respondió Dana mientras jugaba con el filo de su muy corta falda –sé cómo conseguir lo que quiero –decía sonriente. –Y lo que hago aquí...creo que está bastante claro –dijo esta vez atreviéndose a acariciarle la barbilla de forma muy pausada.

-Pues déjame decirte que creo que estas equivocando –contestó levantándose de la silla y apartándose de ella.

-¿De verdad piensas eso? –Preguntó Dana alzando una ceja y examinándola de nuevo de arriba abajo –bonita camisa –dijo clavando la mirada en su pecho –muy bonita –sonrió.

-Tengo trabajo que hacer, te pido que te vayas –dijo de la forma más educada posible.

-Sólo si aceptas venir a mi siguiente fiesta, no viniste a la anterior y me dejaste muy triste –Dana puso un puchero en la cara mientras se acercaba de nuevo hasta ella, cortando el espacio que había instaurado entre ambas, sintiendo como la arrinconaba contra el filo de la mesa.

Tenía que reconocer una cosa, y es que empeño le ponía. Y mucho. La chica no parecía querer darse por vencida en absoluto, aunque ella no le había dado pie a nada en ningún momento.