Capítulo 43

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Pasado

Había pasado la mañana en la galería, intentando organizar unas cuantas nuevas fotografías con las que quería montar una nueva exposición, y su intención era pasar parte de la tarde también, pero un mensaje de Lexa donde le decía de quedar en un punto en concreto la distrajo de todo. Porque lo primordial era lo primordial.

-¿Sabes que aun no hace tiempo para darnos un baño, verdad? -Preguntó nada más bajarse del coche, observando cómo Lexa la esperaba apoyada en el otro completamente sonriente.

-No es mi intención -respondió la castaña mientras ella la rodeaba con los brazos por la cintura para pegarla a su cuerpo y así poder acercar su rostro más al suyo.

-¿Un besito? -Preguntó sonriente a la vez que Lexa acariciaba su nuca.

-Un besito -contestó la castaña siendo ella la que se lo diese.

-Y dime... ¿qué hacemos aquí? -Preguntó curiosa mientras observaba cómo Lexa sacaba del maletero una mochila y una pequeña manta.

-¿Quieres más pistas? -Contestó la castaña burlona con una sonrisa en los labios.

Y la verdad es que no. No hacía falta ninguna pista.

Estaban concretamente en esa pequeña cala que tantas veces había sido su refugio, el mismo sitio que compartía desde hacía ya años con su mujer. Donde habían compartido tantos momentos y sentimientos.

-Hacía tiempo que no veníamos -decía mientras ayudaba a Lexa a estirar una toalla en la que poder sentarse.

-Cierto -contestó la aludida dejando la manta a un lado y abriendo la mochila para ir sacando el contenido -pero bueno, la abuela ha querido quedarse con la pequeña Alycia y quería aprovechar la tarde-noche con mi perfecta mujer. ¿Qué te parece? -le preguntó sonriente.

-Pues más que perfecto -contestó ella mientras Lexa le ofrecía una pequeña bandeja de pastelitos -ahora mismo no, gracias -dijo haciendo que la castaña se encogiese de hombros antes de dejarlos con cuidado cerca de ellas -eso sí que sí -sonrió cuando le enseñó una botella de vino y un par de copas -sabes cómo conquistar a una dama.

-Creo que no se me da del todo mal, no -le siguió Lexa la broma antes de sentarse a su lado mientras ella abría la botella de vino.

-Tampoco te vengas muy arriba, yo es que soy muy blanda ¿sabes? -dijo sonriente mientras servía un poco de vino en una de las copas.

-No, no. Yo no quiero -soltó Lexa con rapidez justo en el momento que iba a servir la segunda -voy a tomarme un zumito -le informó cogiéndolo de la mochila.

-¿Un zumito? -Preguntó desconcertada. -¿No estarás con algún tipo de dieta? Si estás estupenda -dijo clavándole la mirada.

-No, no. No es eso -contestó Lexa con rapidez -ya sabes que me encanta tomarme de vez en cuando una copita de vino, pero creo que hasta dentro de un tiempo no voy a poder.

-Olvídate de las dietas -afirmó ella con rotundidad -déjate de tonterías.

Observó cómo Lexa sonreía mientras negaba con el rostro justo antes de que ella se llevase la copa de vino a los labios para dar un trago. Definitivamente su mujer había perdido la cabeza. A dieta. Menuda locura. Si era la mujer más perfecta que había visto en su vida. Si los dioses existieran fijo que la propia Afrodita acabaría llorando por los rincones por pura envidia.

-Estoy embarazada -soltó la castaña de golpe, provocando que escupiera el vino rápidamente de la boca, escuchando a la vez como Lexa reía con fuerza.

Arkadia 2 (AU) -Español [Clexa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora