Esa mañana era hermosa, Kendrew se levantó de la cama con el roce de la luz del sol sobre su cara y se pasó la mano por la cara para despabilarse...¡¡La mano!! ¡¡Se estaba tocando la cara con esa mano!! El chico enrojeció mientras maldecía a Fred...bueno no fue tan malo. Fred tenía un buen cuerpo, esbelto pero con músculos y ese bello pelirrojo en sus pectorales...y el gigantesco tamaño de...¡¡Se había tocado la boca con esa mano!!
Kendrew consiguió dar esquinazo a Fred durante el día posterior. Era la excursión a Hogsmade y él y sus dos amigos salieron al viejo pueblo. Fueron a la tienda de golosinas pero no le gustó al escocés, nunca le gustaron los dulces ni nada parecido. Isaac y Michael se empeñaron en ir a Zonco, y en esa maldita tienda de artículos de bromas casi le pilla Fred...suerte que se escondió tras un estante.
Al regresar al castillo, los tres Ravenclaw lo hicieron riendo y con alegría pero mientras subían las escaleras se escuchó un grito, provenía del piso de la torre de Gryffindor. Los estudiantes comenzaron a cuchichear al instante y Kendrew se adelantó hasta quedar frente a Hermione.
-¿Qué ocurre?
-La Señora Gorda, el retrato de nuestra puerta, ha desaparecido.
El director llegó en compañía de Filch y este último divisó a la mujer desaparecida, en el interior de un retrato campestre.
Todos los alumnos se agolparon hasta quedar frente al cuadro y la mujer salió de detrás de unas piedras.
-Es del que todos hablan, está aquí...dentro del castillo ¡¡SIRIUS BLACK!!
El director mandó cerrar el castillo. Todos los alumnos debían ir a sus habitaciones, coger un pijama y bajar al Gran Comedor.
Los Ravenclaw entraron corriendo en su sala. Kendrew fue corriendo a su habitación y cogió uno de los pijamas que tenían un bolsillo dentro pero se detuvo...la ventana estaba abierta y nunca estaba abierta, la estufa estaba apagada y había demasiado silencio, ni siquiera Horus decía nada.
Kendrew sacó la varita pero sintió como una mano que salía de la oscuridad, tras de sí, le arrebataba la varita y le tapaba la boca con salvajismo.
Kendrew sintió una espesa barba rozando su piel, un aliento maloliente besando su cuello y una risilla tan demencial que sintió miedo.
-Tú...eres tú ¿verdad?
Kendrew tragó saliva, aterrado.
-Black...eres Sirius Black.
-Tú...eres hijo del diablo- Maldijo el fugado- Eres su hijo ¡Eres su hijo! ¡Su maldito hijo! El hijo de...Fergus.
Unos pasos se escucharon subir por las escaleras y Black aflojó su agarre.
-Ya nos veremos...demonio.
Cuando sintió que se alejaba, Kendrew recogió su varita del suelo y apuntó tras él pero no había nadie, Black había escapado, se había desvanecido en las sombras.
-¡¡Ken, deprisa!!- Ordenó Roger, entrando en compañía de Isaac y Michael que recogieron sus pijamas.
Kendrew hizo lo propio y se cambió rapidísimo, guardando la varita dentro del pijama, en ese momento tenía la sensación de que la necesitaba más que nunca.
Bajaron al comedor y todos comenzaron a acostarse en distintos sacos de dormir y Kendrew se permitió pensar...Black le conocía, sabía quién era, sabía quién era su padre "el hijo de Fergus" fue como Black le llamó. Kendrew sabía que Fergus era el nombre de su padre pero...no ¿cómo le conocía Black?
-Pss...McAlvey.
Kendrew abrió los ojos.
-Potter ¿No puedes dormir?
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Magia en Hogwarts [Saga de Kendrew McAlvey]
FanficLa vida de Kendrew McAlvey siempre fue de todo menos normal. Era un niño especial, un mago en la familia más odiada de toda Gran Bretaña, una familia cuya larga historia siempre estuvo salpicada de criminales, asesinos, nigromantes y...magos oscuros...