41

426 40 4
                                    


CAPÍTULO 41


El resto de febrero se pasó rápido. Emily se había ido de viaje con sus padres –me había enterado a través de Instagram- y no habíamos arreglado las cosas, no apropiadamente.

Me la había pasado en casa de los Price disfrutando la piscina, en casa viendo películas con Matt o yendo al descampado que había descubierto mi novio.

Fue un verano casi de película, me había encantado.

Ahora era momento de enfrentar mi otra realidad, en la cual era una estudiante de secundaria en su último año.

—¿En serio tienes que irte? —rodeé su cintura con mis brazos, él estaba apoyado en el auto con una sonrisa plasmada en el rostro.

—Sí, cariño. Es algo de tu curso, del grupo, no voy a quedarme —negó con la cabeza—. Disfruta tú y luego me cuentas.

—Pero quiero estar contigo... —hice un puchero, me estaba comportando como una niña, pero de verdad quería que se quedara conmigo.

—Mi amor, no... Yo te paso a buscar al mediodía, ¿sí? —me sostuvo por las mejillas, obligándome a verlo a los ojos—. Cualquier cosa me llamas —besó mi nariz con cariño.

—No importa lo que diga, no voy a convencerte, ¿cierto? —bajé la cabeza, de manera que mi cabello me cubrió el rostro.

—Noupe. Si te vas ahora dormimos la siesta juntos... —propuso, moviendo las cejas de arriba a abajo.

—Eso suena tentador, tendré que pensarlo —sonreí, viéndolo reír por la cara de tonta que seguro puse.

—¿Amber? —me llamó una voz conocida, volteé y me encontré con una cabellera rojiza.

—Hey, Tiff —agité una mano, saludándola. Matt aún me sostenía de la cintura cuando ella caminó hacia nosotros.

—Llevo un rato buscándote. Hola Matt —sonrió al alcanzarnos.

—Tiff, tanto tiempo —asintió con la cabeza a modo de saludo—. A ver si tú puedes convencerla de que entre de una vez —rodó los ojos, ganándose un manotazo de mi parte.

—A eso venía —se encogió de hombros la pelirroja—. Las chicas ya están adentro y la música ya está sonando, ¡es momento de empezar la fiesta! —sacudió las caderas.

—¿Ya estás tomada? —bromeé, soltando finalmente a Matthew.

—Aún no —se rió. Negando con la cabeza, fui hacia la parte trasera del coche y saqué mi mochila—. Entonces, ¿vienes?

—Por supuesto —me coloqué bien las correas de la mochila antes de acercarme a mi chico—. No te asustes si tu teléfono suena varias veces en la madrugada —me paré sobre la punta de mis pies para besar sus labios suavemente.

—Sabes que el alcohol no te hace el mismo efecto ahora —susurró bien bajo para que mi amiga no escuchara—. Así que si voy a asustarme —dejó un casto beso en mis labios y se alejó para despedirse de Tiffany también—. Cuídense, chicas.

—Adiós Matt, no te preocupes tanto, estaremos aquí adentro todo el tiempo —le restó importancia.

—Descansa, mi amor —él me sonrió y se subió al coche a continuación.

Tiff enganchó su brazo con el mío, y así caminamos hasta el interior de la casa donde íbamos a celebrar el fin de las vacaciones y el comienzo de nuestro último año.

《Ambett》[AE#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora