《Ambett》[AE#1]

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CAPÍTULO 21

—¿Amber? ¿En qué planeta estás, Amber? —sacudí la cabeza, volviendo a la realidad, en donde finalmente me había reunido con mi mejor amiga a solas para pasar un rato juntas.

—Lo siento, me distraje. ¿Qué decías, Ems? —me disculpé arrepentida, últimamente me desconectaba mucho y sin darme cuenta.

Había dejado que Azul saliera un par de veces para que se mantuviera tranquila y así habituarme a la transformación y poder controlarla mejor. Seguía doliendo bastante, no tanto como la primera, pero lo seguía haciendo.

—¿Estás bien? —sus ojos demostraban lo preocupada que estaba.

Cada vez se hacía más difícil no contarle a mi mejor amiga la verdad, tener que ocultarle secretos me dolía, no me gustaba mentirle. Además, se me daba horrible. Ella me conocía lo suficiente para notar cuando mentía.

—Sí, si —la rubia arqueó una ceja sin creerme—. No ocurre nada conmigo, en serio —evité su mirada—. Solo estoy preocupada por Matt... Año Nuevo es una fecha difícil para los Price.

—Por su madre, lo sé —asintió.

—¿Cómo lo sabes? —fruncí el ceño. Esto era totalmente cierto, Lucile había fallecido un 5 de enero, bien a inicios de año.

—Julian me lo comentó, hablamos bastante seguido —se encogió de hombros, restándole importancia.

—¿Te hablas con mi cuñado y no me contaste? —fruncí el ceño, sorprendida, y la observé fijamente.

—No nos hemos visto mucho —hizo una mueca—. ¿Qué? No me mires así, es cierto.

Ju era un muchacho muy reservado, y este era un tema delicado, del cual le costaba mucho hablar. Que lo haya hecho implicaba que confiaba en ella y eso era genial, pero... Emily era muy enamoradiza, no me gustaría que las cosas terminaran mal porque el chico estaba en búsqueda de su alma gemela y no era ella. No soportaría verla lastimada por alguien que consideraba parte de mi familia.

—Está bien, no voy a decir nada al respecto. Luego hablo con él —murmuré para mí misma, pero Ems me escuchó y me dio un manotazo en el brazo.

—No le vas a decir nada, ¿ok? —la seriedad en su rostro me dio risa, pero evité reírme para que no volviera a golpearme—. ¿Está bien?

—¿Por qué no cambiamos de tema? —propuse—. Hay otras cosas con las que ponernos al día.

—Deberíamos salir un día de estos, hace mucho no lo hacemos... —sugirió, moviendo las cejas. Diablos, había extrañado a mi mejor amiga.

—Sí, desde aquella noche en la que conocí a Matt —sonreí al pensar él, aunque hice una mueca al recordar la situación en la que nos conocimos. Ugh, ese viejo cochino, gracias a Dios apareció ese animal.

Un momento, ese animal...

—Podríamos decirle a los Price que se sumen, ¿qué te parece? —la emoción se notaba claramente en su voz.

—Sí, está bien. ¿Le dices a las chicas? —respondí un poco distraída.

¿Sería posible que...?

—Estoy en eso —la vi tomar su celular rápidamente—. ¿Vamos a invitar a los chicos?

—Claro, aprovechemos que estamos cerca —sonreí. Emily no dudó en ponerse de pie y juntar las cosas velozmente, habíamos decidido venir al parque para hablar tranquilas y más cómodas.