¿Será posible que uno de los personajes mas odiados en la historia tenga un final feliz?
Es lo que intenta averiguar Helena después de todos los acontecimientos que la sentenciaron en Troya. Superando la maldición de convertir en Oro cualquier cos...
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Ese Dios del que me hablo Zeus debía ser muy poderoso como para poder quitar a los dioses guardianes de la tierra, ¡es una locura! ¡Yo ni siquiera debería estar aquí! Debería estar durmiendo como Koala en el mástil del barco de Alvida...
— ¿Me estas escuchando? –dijo Artemisa llamando mi atención.
—Perdona, es que yo todavía no puedo asimilar lo que me está pasando.
—Debe ser difícil para ti, pero no te preocupes; yo te ayudaré en lo que sea... y mientras pueda, claro, ya que yo también he perdido el sentido de la humanidad, así que él me bajara en cualquier momento –Empezó a decir sin quitar esa sonrisa tan carismática –así que debemos darnos prisa y entrenarte, no será fácil.
—Ya conocí al chico apuesto llamado Apolo y a la odiosa Atenea, ellos no eran lo que esperaba.
—Ellos son influenciados por Hera, la legitima esposa de nuestro padre; ella no tolera a los semidioses y especialmente a los que son hijos de las amantes de Zeus.
—Creo que nuestro padre tiene el don de atraer a las Ninfas, Diosas y humanas; creí que Apolo sería como él, pero simplemente fue muy maleducado.
—Él es mi hermano gemelo — ¿Por qué nunca me callo cuando debería hacerlo?
— ¡oh! Perdón, yo no sabía...
—No tienes por qué disculparte, él ha cambiado mucho; antes no era así y ahora casi no me dirige la palabra. –dijo con la mirada más triste que jamás había visto. –Pero es que él también perdió el instinto de proteger a los mortales.
—Siento eso, bueno; yo crecí sola sin hermanos, así que no se lo mucho que debe doler.
—Pero... tu si tienes un hermano, y se podría decir que estamos en la misma situación.
—Creo que esta vez te estas equivocando, yo siempre estuve sola.
—Tienes un hermano gemelo y se llama Pólux, y al igual que tú él es un semidiós, creí que nuestro padre ya te lo había informado.
—Pues creo que nuestro padre tiene problemas de memoria, porque no me dijo nada.
— o tal vez no sabe cómo decírtelo aun, mira tenemos que concentrarnos en tu poderes divinos, tal vez no tengas la fuerza mental de nuestro padre pero puedes desarrollar tus poderes si te esmeras.
— ¿Yo podré lanzar rayos?
—Así es, — Artemisa sonrió ante mi pregunta cliché de los rayos y continúo. —y también podrás tener el don de la clarividencia, esto te ayudara a encontrar a los dioses perdidos en la tierra.
Sentadas en su hermoso jardín Artemisa me enseño como ver lo que pasaría, caminando alrededor de su templo me explico un poco más del lugar donde se reunirían todos los dioses castigados.
