¿Será posible que uno de los personajes mas odiados en la historia tenga un final feliz?
Es lo que intenta averiguar Helena después de todos los acontecimientos que la sentenciaron en Troya. Superando la maldición de convertir en Oro cualquier cos...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— ¿A qué se refiere con inestable?—Pregunta Eros un poco confundido y Pólux lo arrastra para llevarlo a conocer el departamento.
—Me veré ridículo con esto. —Continúa Ares quejándose por el uniforme.
—Artemisa, dame un momento— ella me guiña un ojo y entra a los dormitorios justo con Atena, me acerco a Ares y me siento a su lado. —Yo creo que te quedara increíble, el corte del saco está de moda en la tierra, además no deberás usarlo siempre, hay un uniforme de deportes, vi que lo llevaban puesto en el club de lucha. —Cuando al fin tengo su atención me mira emocionado.
— ¿Hay un club de lucha? ¿Está segura?
—Sí, hasta enseñan a usar armas, supongo que para mantenerse preparado, no querrás perdértelo solo por no usar el uniforme ¿verdad?
— ¿En verdad crees que me veré bien en esto?—me pregunta tomando el saco con repugnancia.
—Te verás increíble, estoy segura, además de que deberíamos recortar un poco tu cabello, por lo menos hasta los hombros, créeme. —Le susurró al oído y lo dejo pensando algo convencido. —Hefesto mira la ventana un tanto pensativo y me uno a él.
— ¿No es curioso? Tenemos vista al mar; cuando afuera no hay mares ni playas.
—Es verdad... debe ser una ventana mágica, aquí hay un control y una nota que dejó Zadquiel dice: "La ventana es un portal a otros lugares del mundo, y solo se puede salir por ella los fines de semana o por mandato de algún profesor por misión, si se sale sin supervisión estaremos enterados y automáticamente se le regresará al Liceo." Y supongo que este control es para cambiar el sitio.
—Déjame probar...—Hefesto toma el control y presiona uno de los botones haciendo que la playa se valla y llegue un bosque fresco en calma...— esto será divertido.
— ¿Helena?— pregunta Apolo que sale de la puerta del baño algo avergonzado. — ¿Podrías ayudarme con algo?— Miro a Hefesto y sin dudar lo sigo.
—Desde que llegamos al campo tengo unas ganas enormes de... ya sabes.
— ¿De hacer del baño?— preguntó un tanto divertida con su actitud.
—si...si pero el problema es que no sé cómo utilizar este asiento extraño con agua. —Me impresiono al darme cuenta que Apolo no recuerda absolutamente nada sobre como los humanos ocupan el baño.
—No te preocupes, no es la gran ciencia... —Me rasco la cabeza un tanto nerviosa y él me presta toda la atención del mundo. — ya sabes si tienes la necesidad de hacer del... dos...simplemente te sientas... y si es del uno pues... lo sujetas firme y...
—Esto también es incómodo para mí, solo se directa ¿bien?... jamás había sentido esa sensación en el estómago. —Sonrió divertida al ver como Apolo ha perdido toda la actitud de dios y ahora está nervioso sujetando su estómago.
