36. Promesa.

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– ¿ah? ¿De que estai hablando tae? No estoy pa bromas.– respondí alterado.

– te lo juro weon, está afuera, la cami no quiere salir, tiene miedo.– conchetumare, demás que era la mamá ¿y si me quita a la Camila? Weon yo no puedo hacer nada hasta que ella cumpla los dieciocho.

– ayúdame por favor, baja y hablémosle, la señora está muy alterada.– asentí y salimos de mi habitación para bajar al primer piso, encontré a la cami llorando en el sillón, puta la wea.

Le dije a tae que se quedara tranquilizando a la cami, ¿como chucha supo la vieja que la cami estaba metida aquí? Tengo miedo, es desesperante pensar que se la puede llevar nuevamente a vivir con ella, en esa casa de mierda, toda deshecha, ¿y si volvía a ocurrir lo de antes? ¿Y si la señora volvía a traer a hombres a su casa y se sobrepasaban con la cami? Juro que me mato si le pasa algo a mi niña.

La señora estaba tocando la puerta de mi casa súper enojada, como si la fuera a echar abajo.

Con todo el miedo del mundo, abrí la puerta, yo jamás había visto a la mamá de la Camila, de hecho cuando fui a ayudarla a buscar sus cosas en su casa la mamá no estaba, habían puras botellas de cerveza en el piso, pero ni un rastro de ella.

Solo podía decir que no se parecía en nada a la cami, demás que ella había salido como su papá, lástima que jamás conoceré a ese caballero.

– ¿TÚ ERI EL PEDOFILO QUE TIENE A MI HIJA?.– preguntó ¿qué? ¿Pedofilo? ¿Yo?.

– señora cálmese, si no voy a tener que llamas a los carabineros.– intenté tranquilizarla.

– ¿TÚ VAI A LLAMAR A LOS PACOS? MIRA CONCHETUMARE, LA ÚNICA QUE LOS VA A LLAMAR SOY YO, POR SECUESTRAR A UNA NIÑA DE DIECISIETE.– ¿de qué habla? Vieja culia, le dimos el hogar y el amor que ella nunca supo darle.

– señora, disculpe que le diga, pero aquí nadie tiene secuestrada a su hija, ella está aquí por voluntad propia.– estaba intentando razonar con ella, ya veía que le pegaba un combo en todo el hocico, diosito dame paciencia, que si me dai fuerza mato a la culia.

– ¿CÓMO QUE NO?.– me empujó brutalmente hacia atrás, pasando a mi casa, ¿puedo llamar a los pacos por esto cierto?.

La Camila la miró con miedo, que penca llegar a ese punto con tu mamá y puta, me da demasiada pena y la entiendo, sé lo que es escapar de tu familia porque llevas una vida de mierda, si es que se puede denominar vida eso.

– mamá, por favor, nadie me tiene secuestrada, déjame aquí.– prácticamente le suplicó, estaba llorando y las lágrimas le caían por toda su cara que se encontraba rojita.

– ¡CÁLLATE! ¿DÓNDE MIERDA TE VINISTE A METER? SI NO ME HUBIERAN LLAMADO DE TU COLEGIO PARA SABER QUE TE SUSPENDIERON YO SEGUIRÍA BUSCÁNDOTE MIERDA, TUVE QUE LLAMAR A TÚ AMIGA LA CARLA PARA SABER DÓNDE ESTABAS METIDA.– la mamá comenzó a llorar, quizás si estaba arrepentida de lo que había pasado, pero si la quería devuelta, debió de haber venido hace meses ya, no esperar ya la mitad de un año para buscarla.

Más encima la maraca de la Carla fue quien le avisó a la mamá donde se hallaba la cami, weon juro que la odio con toda mi alma.

La señora aún llorando agarró a la Camila.

– ¿sabes el maldito susto que pasé? MESES BUSCÁNDOTE CAMILA POR LA RECHUCHA.

Y ahí supe que todo se iría a la mierda, el cumpleaños de la cami, la salida a la nieve, muchas cosas que estaba planeando hacer en el futuro. es realmente impresionante como tu mundo se puede caer en una fracción de segundos.

El mall chino [KookMin] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora