Dios

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En los tiempos que corren, parece que decir que crees en Dios es sinónimo de practicar una religión concreta o creer en cosas poco razonables sin indicios de pruebas de lo que se dice Hay quién hasta le puede dar vergüenza confesarlo, como que es algo ya no se lleva o algo así. Todo concepto puede llevar al equívoco, pues no puede haber definición para lo indefinible. Y son muchos los que atribuyen a Dios cosas que son más fruto de nuestros pensamientos. Tan respetable es la opción del ateo como el del agnóstico, como la del creyente. Sigo pensando que tener una relación estrecha con una inteligencia superior no se basa en dogmas o una serie de normas. Sino en la disposición de entrega como receptor a ese núcleo divino que existe dentro de cada cosa dando aliento de vida. La verdadera espiritualidad se vive cuando nos desnudamos de todos los prejuicios y nos dedicamos a sentir la presencia del Jefe, sin valoraciones ni juicios. Abriendo puertas y ventanas desde lo más profundo del Ser.



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El desván del gato verdeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora