Los rayos de sol no distinguen el lugar donde brillan. El fuego de una hoguera a quien aporta calor. La sombra no hace diferencias de a quien cobija. La tierra no se niega a ningún pie que la pisa. Por el mismo camino pasan todos dejando diferentes huellas. Las flores esparcen su aroma sin discriminar quien las huele. El aire no elige quien lo respira. El árbol da fruto a quien lo toma. La fuente sacia la sed de todos. La cueva no detiene a quien busca refugio. La lluvia empapa sin mirar quien moja. Así el amor se da a si mismo. Se retroalimenta de su propia esencia. Se ofrece a cambio de nada. El amor es el propósito. Es la única ruta que seguir. Se entrega para recibirse a si mismo. Es cuando los procesos mentales se detienen, el amor se convierte en movimiento. El universo se expande abrazando el cosmos. Los astros se atraen formando órbitas amorosas. El amor que no posee ni es poseído. El amor se enamora del amor.
Alberto Real Borrueco
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El desván del gato verde
SpiritualEl desván del gato verde es un compendio de reflexiones, sobre el mundo que nos rodea y la vida en general escrito en clave de poesía. Un viaje a través de pensamientos, que consideran a la espiritualidad, la brújula fundamental para tomar rumbo ha...