En el vertedero de los sueños el olvido que no olvida. Es aquello que no se dice acompaña a la soledad. Como un compañero con cadenas el pensamiento. Es la razón la que intenta acallar los gritos que un día fueron los susurro del corazón. En los silencios el desván de los deseos. En el exceso de prudencia la imprudencia. Sólo nos hace libre aquello que nos hace sentirnos vivo. Como guardar un tesoro sin repartirlo. Como la flor no guarda el aroma para si misma. Aquello que no se vive, se marchita como una rosa. Es mejor no dejar pasar un te quiero, un te perdono, un lo siento o un gracias de corazón. Al atardecer solo te llevas de equipaje lo que has amado.
Alberto Real Borrueco
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El desván del gato verde
SpiritualEl desván del gato verde es un compendio de reflexiones, sobre el mundo que nos rodea y la vida en general escrito en clave de poesía. Un viaje a través de pensamientos, que consideran a la espiritualidad, la brújula fundamental para tomar rumbo ha...
