12.

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No entiende cómo ha podido dormir tanto. Abriendo lentamente uno de sus ojos ve que su despertador marca las doce del mediodía. Supone que su cuerpo lo necesitaba después de tantas emociones acumuladas a lo largo de esos días. Por fin ha podido dormir toda la noche del tirón, sin pesadillas, y se levanta sin ganas de vomitar, lo que significa que los nervios que parecían haberse instalado en su estómago días atrás han decidido largarse.

Coge su móvil y ve que él le ha dejado un par de mensajes en WhatsApp, y al leerlos no puede evitar reírse de sus ocurrencias. Estábamos más arreglados anoche que en muchos photocalls de la promo de Eurovisión. Por cierto, el rojo es tu color ni se te ocurra dejar de llevarlo. Sabe perfectamente que el rojo es su color, sobre todo cuando su melena es completamente oscura, y le contesta al mensaje prometiéndole que la próxima gala en la que coincidan utilizará ese tono.

Baja a la cocina, allí están todos los miembros de su familia perfectamente vestidos, sólo les faltan los abrigos.

—No queríamos despertarte pero es que tenemos que ir a comer a Sorauren, van a estar allí todos tus tíos y tus primos. Ya puedes mover ese culo para ducharte y estar lista en media hora —le informa Ángela.

Amaia desayuna más rápido que en toda su vida, tiene un hambre voraz, como si acabara de correr la Maratón de Nueva York. Se ducha, ni siquiera se pone música así que tampoco se da el privilegio de estar bajo el agua mucho rato. Se viste con los pantalones multicolor y una camiseta blanca. Aún hace algo de calor como para usar jersey, aunque Javiera le ha cogido uno sin consultarle, sabe que el bien más preciado de su hija es la voz y si se queda afónica no podrá deleitar al público con ese don.

Diego, el novio de Ángela, ha ido a recogerlas hasta Mendillorri. La mañana anterior Eva había llegado desde Barcelona en el mismo tren en el que le le hubiera correspondido llegar a Alfred, así que hay un problema de espacio en el coche de los Romero y Diego se ha prestado a hacer las veces de chófer con Ángela y con Amaia.

Su cuñado le cae bien, siempre está dispuesto a echar una mano cuando es necesario, es uno más en la familia. Sin embargo, sabe que muchas veces Ángela y él discuten muy fuerte, al punto de que ese mismo verano lo dejaron durante un tiempo. Tienen caracteres muy distintos y quizás eso es lo que les hace estar tan unidos, los polos opuestos realmente se atraen.

Pero ella y Alfred son tan parecidos... Ambos son cabezotas, dicharacheros, creen que tienen la verdad absoluta siempre, tienen esa capacidad de sacarse de quicio el uno al otro pero también de perdonárselo todo. Se le dibuja una sonrisa sólo de evocar la clase de relación que tienen, así que decide escribirle.

vamos de camino a Sorauren, hoy como con mi familia. mi primo Íñigo tenía muchas ganas de verte, pero creo que le voy a invitar a venir un finde a barcelona para enseñarle la ciudad y que os conozcáis mejor, es muy fan tuyo

Pues que venga cuando él quiera. Si le apetece hasta le podemos llevar a un estudio de grabación y que se cante algo con nosotros, no??

Hoy cantas con El Kanka, ¿estás nerviosa, Amaix?

pues un poco sí, la verdad. pero es un sueño más que voy a realizar.

Esta tarde estaré pendiente de los Periscopes, espero que alguien te grabe.

seguro que sí. ayer me pareció ver entre el público a la chica que siempre nos graba. ¿has visto que ha subido a YouTube todos los vídeos de nuestros conciertos?

¡Qué guapa l'Amaia cantando Miedo!

La chica se sonroja, le encanta que le diga esas cosas pero aún no se acostumbra a ello. Se despiden porque Amaia ya ha llegado hasta la casa familiar. No ha caído en que nadie ha informado a su familia que Alfred no va a acudir al encuentro. No quiere tener que dar más explicaciones de las que ya ha dado; sin embargo, nadie pregunta por él. Su abuela le abraza y le pide que le cuente qué tal todo.

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