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Está nervioso, inquieto, ante los futuros acontecimientos. No sabe cómo afrontar el próximo reto que se le presenta, solo, sin más compañía que la de su seguridad en sí mismo. Recuerda cuando ella le insistió en agosto que le acompañara al casting final, junto con Roi, Ana y Aitana, pero él se negó porque tenía que reunirse con un pez gordo de la industria para ver si producía su primer disco.

Aquella reunión no acabó como él esperaba; sin embargo, piensa que todo ha merecido la pena: va a sacar 1016 producido por él mismo, sin más ayuda que la de Isabel y la banda, que han confiado a ciegas en él. Y de Amaia, cómo olvidar que ella está presente en sus letras.

Mira la hora en su teléfono móvil. Anoche ella le escribió un texto que aún no se ha atrevido a leer, no recordaba ser tan cobarde. Para ser sincero consigo mismo, lleva huyendo de una realidad que le atormenta desde que volvió a Barcelona. Necesita hablar con ella, pero no encuentra las palabras adecuadas para romper el hielo.

Se mete en Twitter y todo son opiniones positivas de su primer single. Anoche estaba más nervioso de lo que él habría podido imaginar. Esa canción, De la Tierra hasta Marte, habla de ella, de Amaia, y es un grito desesperado a que la chica no le deje a la deriva, a que no le abandone en ese mundo cruel y superficial como el de la industria musical.

Cuando ayer por la noche leyó las dos primeras frases que Amaia le había dedicado, supo que el mensaje empezaba de forma amistosa al menos; sin embargo, no está del todo decidido a ver cómo continúa. ¿Y si la han cagado tanto que ella le ha mandado ese mensaje a modo de despedida?

Sus manos le sudan, dentro de un par de horas tiene que llegar a Terrassa para dar una charla a los concursantes de esta edición de Operación Triunfo y por la noche estará en el plató presentando en primicia su primer single. Tiene ilusión, pero un torbellino de nervios le abrasa por dentro.

Sí, quizás hubiera sido más fácil aguantar el golpe si él hubiera estado con sus compañeros en agosto antes que ver cómo el lugar que fue su hogar durante 3 meses, donde nació su amor por Amaia, está siendo "profanado" por completos desconocidos. Puede que sea así cómo se sienta ella recordando momentos del pasado, ese sentimiento de nostalgia que suele apoderarse de la chica en los días de tormenta.

Ella, siempre ella, la única persona que ocupa sus pensamientos prácticamente las 24 horas del día de los 7 días de su semana. El móvil parece quemarle en las manos, necesita saber cuál es la opinión de la chica, introduce su contraseña, entra en WhatsApp y da click decidido sobre el chat con el nombre de ella.

Alfred, me ha encantado el videoclip... siento mucho que no pudieras grabarlo en Navarra, pero te ha quedado muy bonito. Hay muchísimas cosas que hablan de nosotros en él. Me han dicho que mañana vas a ot espero que lo hagas genial y dejes a todo el mundo flipando con tu directo, porque es increíble. Tengo muchas ganas de ver cómo te ha quedado el disco

Un mensaje amable, educado, un tanto impersonal, pero supone que ella está también un poco como él. No saben cómo hablarse, pero al menos ella ha tenido el valor de romper el hielo. No sabe si contestar o no, sabe que la chica está impaciente por ver cuál es su reacción y hacerle sufrir tampoco va con él. No de manera consciente.

Gracias, Amaix. Tú me inspiraste para crear esa canción y para decorar la habitación donde fue grabado, aunque me habría encantado haber podido grabarlo en Navarra para simular mi llegada a Marte. Supongo que eso ya da igual. Gracias por tus palabras. Hablamos.

Se arrepiente de haber sido tan seco con ella, pero no sabe si debe ser tierno, ni si ella está receptiva para ese tipo de mensajes. Termina de arreglarse el pelo, se ha despeinado un poco al ponerse el jersey de cuello alto. Isabel le espera en un coche en la puerta de su casa para encaminarse hacia la Academia.

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