Capítulo 34

1.4K 66 0
                                    

¿Sabéis de esa sensación de que sentís que os están observando? Pues, al abrir los ojos al sentir tal cosa me encuentro con un Rubén con el pelo demasiado revuelto y con una sonrisa tonta en el rostro.
-Buenos días, bella durmiente.
-Buenos días, león. - Le digo refiriéndome a su pelo, mientras que una risa se escapa entre mis labios.
-Eso ríete, lo que pasa que envidias mi pelo porque es mejor que el tuyo.
- Prefiero el mío, gracias. - Le guiño un ojo y noto un leve sonrojo, cosa que hace que sea más mono y caiga un poco más en esa trampa llamada "amor".
-Oye, ¿puedo saber que fue que soñaste ayer? - Sabía que me lo iba a preguntar.
-Aún no. Algún día te lo contaré, ¿vale?
-Vale, cuando tú te veas preparada hablaremos.
-Gracias, Rubén, eso me ayuda. Siempre me esforzaban a contarlo,pero me encerraba en banda y a la única que me abrí fue a Judith. Y era porque me enseñó en que podría confiar en alguien en esta miserable vida.- Me abraza y me da un casto y rápido beso en los labios.
-Cuando estés segura y confíes del todo aquí estoy, cielo.
Ahora soy yo quien se acerca para darle un beso mientras me aferro a él con toda mi alma.
-¿Qué hora es?- Mira su móvil y frunce el ceño.- Son las doce del mediodía.
-¿Pasa algo?
-No, tranquila. Una cosa del trabajo. Tenemos que ir a comprar las cosas para la despedida de Judith.
-¡Es verdad! Dile a Mangel que a las ocho en nuestra casa.
-Vale.- Me sonríe y siento que se me va a salir el corazón de su sitio. ¿Se quedará conmigo cuando le cuente mi pasado?
Nos levantamos, desayunamos con nuestra parsimonia y nos vestimos corriendo para ir a comprar las cosas. Lo que compramos son chuches, cosas sueltas para hacer tapitas y confetti.¡Ah! Añádele en que se ha comprado unas gafas con luces y unas pulseras preciosas que ponen: "Best friends" que según él es el significado de nuestra gran y preciosa amistad. Cuando llegamos a la casa de Rubén nos tiramos en el sofá y caemos en los brazos de morfeo.

         ~Después de 4 horas~
-
Niña, niña, dormilona despierta.
-Cinco minutos más.- Le ruego.
-Levanta ya.
-¡No!
No oigo nada y al no oír nada sonrío victoriosa por lo que me pongo de lado para pillar de nuevo el sueño hasta que escucho por los altavoces de la televisión gritos de cacatúas, y me levanto rápido.
-Pero, ¿qué coño? ¡RUBÉN! - Oigo su risa y lo veo acercarse con el teléfono.
-He grabado tu cara de susto y enf...-Deja de reírse al ver en la manera en la que me acerco, le quito el móvil y lo grabo.
-¿Te crees gracioso? Solo te he pedido cinco minutos y me haces esto.- Le digo con tono de enfado y su cara muestra miedo.
-Perdo...
- ¡No, Rubén! Ni perdón ni perdoni.
-¿Perdoni? - Dice con cara confusa y aguantándose la risa.
-¿Ves que sea gracioso o me reía? - Le digo sonriendo
-____________, me estas dando miedo.
-¿De verdad, amor?
-Aja...
-¡CAÍSTE! - Empiezo a reírme mientras Rubén abre la boca de par en par.-Menos mal que he grabado tu cara de miedo.
Me sigo riendo y el sólo está confundido hasta que empieza a reírse.
-Vale, tengo que aceptar que he caído. ¿Sabes? Soy el mejor trolleador así que ten cuidado.
-Sí, ¡ja! Ten cuidado tú.
Después de pelear como niños pequeños, nos vestimos y cogemos las cosas para ir a mi casa para preparar todo.

Mi Tentación (Elrubius y tu HOT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora