Capítulo 81

452 23 1
                                    

Al llegar al trabajo saludo a Clara, la cual me regala una sonrisa.

-__________.- Detengo mi paso al oír como me llama.

-¿Qué ocurre, Clara?

-Nada malo, pero es que quería darte esto.

Veo como saca de detrás de su espalda una foto y al mirarla no puedo evitar que se me forme una sonrisa boba al ver al pequeño Theodore con un juguete en la boca.

-Que guapo es señor, tengo ganas de verlo para agarrar sus regordetas mejillas y poder decirle lo mucho que le quiero.

-Seguro que quiere ver a su tía ____________.- Levanto la cabeza al escuchar esa confesión.- Ya mismo celebraré su bautizo y quiero que tu seas la madrina de mi hijo, verás eres mi mejor amiga y la única que siempre me ha ayudado cuando más lo necesitaba. Has estado ahí desde el minuto uno y sobre todo estuviste en mis momentos más difíciles de mi vida...-Suelta un suspiro haciendo que se me escape una lágrima.- Siempre has sido tú, cariño.

La envuelvo en un abrazo y puedo sentir como me aprieta fuerte contra ella oyendo al momento algunos suspiros cosa que significa que también está llorando.

-Por supuesto que acepto ser la madrina de este adorable niño.

-No era una pregunta, cielo. Era una afirmación si no te pego en el culete.-Dice mientras me señala con el dedo.

-Lo siento, mamá.-Digo alzando las manos.

-Voy a seguir con lo mío, por cierto, he decido aplazar tus citas a mañana, puesto que eran para esta mañana y sabía que esta tarde te ibas a dedicar a los apuntes.

-Muchas gracias, Clara.-Le dejo un beso en la mejilla y decido irme hacia mi despacho.

Toda la tarde la paso revisando el documento que le tengo que enviar a Manuel y es que necesito que todo esté en orden, se lo entrego y vuelvo a mi lugar de trabajo para terminar de anotar unos apuntes sobre algunos pacientes que han ingresado nuevos. Sobre las diez voy cerrando todo y al salir me encuentro con Clara.

-Hoy me apetecía irme contigo.

-Claro, ¿vamos?

-Sí.

Salimos de la clínica y me encuentro de nuevo al hombre de ayer mirándome fijamente cosa que no pasa desapercibida para Clara.

-¿Lo conoces?-Dice preocupada.

-No, a lo mejor piensa que soy otra persona.

-¿ _____________?- Me giro al escuchar mi nombre que es pronunciado por el hombre misterioso.

-Disculpe, ¿lo conozco de algo?-Intento acercarme para poder verlo, pero este retrocede al ver mis intenciones.

-Le sugiero que no se acerqué ni un centímetro más.

-¿Qué quiere de mí?

-Yo nada, pero mi jefe sí. Solo vengo hacer mi trabajo, por cierto ¿puedes saludar a Tom de nuestra parte?

Antes de girarse me muestra una sonrisa que no me agrada nada, me doy la vuelta y sigo mi camino con Clara la cual no para de insistir sobre el tema y que tengo que cambiar de conversación varias veces. Me deja en mi casa y le digo que me avise cuando llegue a la suya debido a que temo que le ocurra algo de camino a su hogar. Entro a casa y no veo rastro de Judith, supongo que estará con Mangel, me cambio y le mandó un mensaje a Rubén para que sepa que me encuentro bien con lo que decido esperar a mi amiga para cenar juntas. Mi móvil comienza a vibrar.

-¿Sí?-Digo dudosa al ver que el número es desconocido.

-_________________.- Su voz hace que pegue un salto.

-Tom, por dios, ¿dónde estás?- Le digo preocupada.

-Ahora mismo en otro país, pero debo de decirte que ya mismo iré a por ti. Tenemos que huir de Europa e irnos a Asia.

-¿Por qué? ¿Qué está pasando?

-Ya te lo contaré cuando te avise, prepárate para cuando te llame.

-Per...

-¿¡Quieres hacerme caso por una vez!?-Suelta alterado.

-Vale, vale. Ten cuidado.

-Lo tendré y haz lo mismo.

Cuelga y en mi mente puedo imaginarme diversas cosas de lo que puede estar pasando, tengo que tumbarme en el sofá para no desmayarme. ¿Qué está ocurriendo aquí? ¿Por qué estas últimas semanas todo es una incógnita? Escucho como se abre la puerta y me pongo en guardia, pero al ver que la que entra es Judith riendo bajo la guardia.

-Lo siento, he estado con Mangel y no había mirado la hora, por lo que como recompensa he pedido en el Mexicano.

-No pasa nada, ¿cómo te ha ido?

-Bien, pero Mangel tiene unos buenos moratones.-Dice riéndose.

-No seas así con él.- Digo intentando no reírme.

-Para la próxima no lo hace, ya verás.

Veo como suelta la cena en la mesa y se va a su cuarto para cambiarse con lo que yo decido acercarme a la comida para probar si tiene algo, pienso que si ese hombre sabe dónde trabajo puede que sepa todos aquellos lugares que frecuento y ha podido hacer algo. Al probar un trozo de cada comida no siento ningún efecto con lo que suspiro aliviada, veo como Judith aparece en mi campo de visión.

-Hoy me ha pedido Clara que sea la madrina de Theodore, mira.- Saco del bolso la foto de Theodore y se la muestro a Judith.

Puedo ver como se forma una sonrisa en su rostro.

-Me alegro mucho por ti y es un niño muy adorable.

-Lo es, espero verlo mañana. Creo que Clara se lo traerá porque mañana está la guardería cerrada.

-Mándame una foto.

-Por supuesto.

-¿Sabes algo ya?-Pregunta refiriéndose al tema de Tom.

-Sí, me ha llamado hoy y me ha dicho que se encuentra bien que no ocurre nada.

Siento mucho mentirle, pero no quiero que se esté preocupando por mí y tenga que estar todo el día atenta a mi persona para que luego se esté perdiendo momentos fantásticos de su vida.

-Me alegro mucho.- Dice con una sonrisa de oreja a oreja.-¿Cenamos?

-Claro, tengo mucha hambre.

-Ya veo, creo que has empezado sin mí.

-Lo siento.- Digo dándole un beso.

Nos comemos todo y decidimos hacer una noche de películas de Disney, la que al cabo de cuatro películas me quedo dormida y puedo oír alguna queja de Judith antes de dormirme del todo. 

Mi Tentación (Elrubius y tu HOT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora